Se puso en marcha el juicio al contralor

Con más de media hora de retraso se inició la sesión extraordinaria en la Cámara de Senadores, que tiene como único punto el tratamiento del juicio político al contralor Rubén Velázquez Gadea, acusado por “mal desempeño en funciones”.

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La sesión estaba fijada para las 09:00, pero se inició casi a las 09:40. La primera parte fue la constitución del Tribunal, que está integrado por los 45 senadores. Luego, los diputados que fueron designados como fiscales acusadores iniciaron la exposición de los argumentos de la acusación.

“(La democracia) está en crisis por la irresponsabilidad de la persona que ha sido nominada para representar a la Contraloría”, dijo el diputado colorado Ramón Romero Roa, uno de los fiscales. Para él, Velázquez Gadea “carece de autoridad moral para proseguir en el cargo” y que la única forma de recuperar la confianza de la ciudadanía en la institución es desplazando al contralor. “No queda otro camino”, señaló. “Nunca antes llegó a tan bajo nivel donde los hechos de corrupción carcomieron los tejidos en el cumplimiento de los fines de la Contraloría”, manifestó luego. 

Los demás fiscales acusadores son Óscar Tuma y Bernardo Villalba; el liberal Eusebio Alvarenga y la ex Patria Querida y ahora independiente, Olga Ferreira. El martes 11, a las 15:00, se realizará la segunda sesión extra del Senado para escuchar a la defensa del contralor y la posibilidad de presentar pruebas.

El miércoles 12 de agosto será día clave porque se realizarán tres sesiones extraordinarias. A las 15:00 se estudiará la admisión y/o el rechazo de las pruebas ofrecidas. En la sesión extra de las 16:00 se resolverá la admisión o el rechazo de cada prueba ofrecida por las partes y en la quinta y última sesión extra el Senado deliberará en forma pública sobre los alegatos y pruebas. Seguidamente, se procederá a la votación nominal para conocer si la sentencia es condenatoria o absolutoria. Se requieren 30 de 45 votos para poder sacar a Velázquez Gadea del cargo.

Este juicio político se produce luego de ponerse en evidencia la corrupción dentro de la Contraloría, especialmente por el caso de la “secretaria VIP” Liz Paola Duarte Meza, quien, según los alegatos, incrementaba sus ingresos marcando hasta 500 horas extra, incluso en horario nocturno. Con esta supuesta maniobra cobraba G. 22 millones mensuales. En febrero pasado, según expusieron los diputados, la joven cobró más de G. 17 millones en concepto de horas extras, pese a que estaba de vacaciones.

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