Cientos de personas participaron de la actividad en la que los integrantes de la alegoría vistieron atuendos de la época y el personaje de Jesús encarnado por David Rodi iba montado en burrito.
La celebración litúrgica con la bendición de las palmas se realizó en el templo de San Francisco de Asís.
Este mismo grupo es el que organiza el Víacrucis en el Kurusu Cerro ubicado en la compañía Zanja Hû de esta localidad y que podrá ser apreciado el viernes santo a partir de las 10:00.

Cada año miles de personas asisten a este evento que se realiza en su 11ª edición. Intensos son los preparativos para el Víacrucis cuya característica principal es el realismo con que se encara a los personajes.