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Con máscaras, pancartas y botellas de plástico se reunieron los militantes del JLRA exigiendo la investigación de la muerte de Rodrigo Quintana y la libertad de Patrón. “Ayer vimos morir a nuestro compañero Rodrigo, vimos cómo lo asesinaban de forma salvaje al más puro estilo de la dictadura stronista, y hoy vemos a un compañero preso. No vamos a descansar hasta que se haga justicia”, dijo a ABC Color Olga Paredes, dirigente juvenil.
La manifestación fue una muestra de repudio contra la justicia paraguaya. “Nos indignamos porque les preocupa más la destrucción de una computadora (del Congreso), inventando una causa por bombas molotov, en lugar de investigar la muerte de Rodrigo Quintana”, expresó la joven.
Sobre la supuesta elaboración de bombas, hecho por el que está procesado Patrón, Paredes dijo que eran botellas de plástico y además contenían vinagre, utilizadas para asistir a los jóvenes liberales que fueron afectados por los gases lacrimógenos lanzados por la Policía.
Los manifestantes hicieron la entrega simbólica de una computadora, de forma sarcástica, por la que fue destruida durante los disturbios y que fue captado en fotografías. “Parece que al Ministerio Público de Horacio Cartes le interesa más una computadora que la investigación del bien jurídico más importante que es la vida”, repudió.
Desde la JLRA responsabilizan directamente al presidente Horacio Cartes de haber dado la orden de asesinar a Quintana en la madrugada del 1 de abril pasado “por todas sus acciones de persecución a todos los jóvenes opositores a su régimen. Nos ratificamos en que es un enemigo de la juventud paraguaya”.