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“Como vos decís, tenés tu padrino, y si a tu padrino González Daher no se le tocó, menos a vos”, se escucha mencionar a la interlocutora de Iturburo en el audio en que se revela la manera en que se negociaba para "inflar" votos a cambio de dinero, tras las elecciones del pasado 22 de abril. Él responde alardeando: ”Por eso, no te vayas a preocupar, nena”.
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En una de las conversaciones, el ahora apartado jefe de Control de Calidad de la Dirección de Informática del TSJE, además, se considera un intocable de justicia. “No te vayas a preocupar, dejame, yo me voy a encargar de ellos, no te preocupes. Tuve en mi vida 58 demandas: 23 de Patria Querida, 7 del PLRA, 2 del PEN, todo así (...) En mi historia, estoy acostumbrado, soy versado en esto”, expresa, apelando a judicializar cualquier reclamo en su contra.
Desde el TSJE e incluso varios sectores políticos como la ANR y Unace, partidos mencionados por el funcionario, insisten en restar importancia a la función de Iturburo, quien afirmó que “yo a Oviedo Matto le di 200 votos”, entre otras varias afirmaciones que implican a partidos políticos. A través de sus redes sociales también compartió fotografías con la senadora Lilian Samaniego.
Iturburo no solo se jactaba de sus influencias políticas sino también en los estrados judiciales de la Justicia Electoral. Según menciona él mismo, habría realizado trámites para que una sola persona pueda administrar y disponer “a mansalva” del subsidio y aporte electoral del Partido Socialista Democrático Herederos (PSDH), que deberían estar destinados a formación cívica y gastos de campaña.
Iturburo lamentó que finalmente no se pudo disponer de ese dinero porque no se hicieron los trámites desde el partido. “Finalmente, su responsabilidad (de la presidenta del Partido Herederos) era tener RUC, cobrar el aporte y el subsidio para poder hacer su reparto equitativo o poder comer todo ella, lo que quiera y hacerlo más institucional y no lo hizo y se perdió todito eso”, expresó.
Confesó igualmente: “Yo le otorgué el subsidio, logré que fuera solo para ella, nena, imaginate na lo que hice en contra de ustedes, te digo la verdad. Esta vuelta ya no va a ocurrir, eso yo me voy a callar y espero que acudan a mí para que les defienda (...). Esta vuelta yo hice lo que quise porque estuve solo y ella me dirigía, y nadie de ustedes venía. Ahora vos tenés otra chance, en un año y medio comienza el tema de las intendentables, es ahí donde tienen que venir ustedes y rodearme”. Hasta reconoce que fue “puerco” por operar contra sus nuevos allegados.
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Otro punto en que se refleja las influencias de Iturburo es cuando le solicitaron que legalice una candidatura irregular, pese a que los plazos ya habían expirado. El mismo afirmó que hizo los trámites, pero a mala gana, ya que lo habían “puenteado” y terminaron pagándole apenas G. 5 millones de los G. 20 millones que le prometieron.
“Me dio nio un 5 (millones), sabés nio eso, y se burló de mí porque el trato era 20 (millones) y me usó, me hizo esperar ahí, vos estabas, eso fue una humillación, nena, yo me callé nomás”, relata.
Afirmó que por esos G. 5 millones no podría asegurar una resolución a favor de los solicitantes. “Pero les aviso: yo voy a luchar y les voy a tener la respuesta, pero no puedo garantizar que sea así o no”. “¿Pero vas a luchar?” -le preguntaron-. “Siempre que te he dicho he cumplido con lo que prometo y lucho, y lo hice. El Tribunal me respondió tres días después antes que todos ellos sepan. Me respondió la negativa y me mandó el dictamen del fiscal y le entregué dos copias y le subrayé el error”, comentó.
Con esto expresa que miembros del Tribunal le daban información privilegiada y hasta sugiere injerencia en las decisiones. “Agarré el dinero porque me dieron esperanza, porque leí el expediente pero no miré la fecha. Después, la fiscala dictaminó y argumentó la fecha (que ya había expirado el plazo), entonces el TSJE ratificó la decisión del Tribunal. Es una de las pocas veces que Miguel -refiriéndose a él mismo- perdió un caso. Los tres miembros del Tribunal me llamaron y me dijeron: ‘No podemos ayudarte, Miguel, doctor, es ilegal, él debe ser candidato, él renunció pero se hizo mal el papel, vos no hiciste este, ¿o sí? Ahí tuve que decir que no, si no iba a decir que soy un idiota. (...) Voy a serte un poco arrogante: yo me burlé de las dos nenas”, finaliza relatando.