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La intervención estuvo a cargo de la Municipalidad de Asunción y la Fiscalía del Medio Ambiente, quienes constataron que se erigieron unas 20 pequeñas viviendas, 10 de ellas en precarias condiciones.
Se comprobó, además, que se siguen arrojando basuras y escombros en una zona totalmente prohibida para el efecto.
El operativo estuvo a cargo de la Dirección General de Gestión Ambiental, junto a personal de Seguridad y técnicos de la Dirección de Obras Particulares de la Municipalidad de Asunción.
El Dr. José Luís Casaccia participó como fiscal interviniente, y tomó varias providencias en el lugar al constatar la gravedad del daño que se comete en una zona calificada como importante para la defensa del medioambiente.
Al encontrar nuevas viviendas precarias a la vera de la laguna, el fiscal Casaccia labró acta y procedió, junto a la Municipalidad de Asunción, a notificar a los moradores que deben mudarse del lugar y destruir sus viviendas precarias, debido a que la zona es un espacio público municipal y no cuentan con permiso correspondiente para morar en la zona.
Asimismo, se procedió a la destrucción de unas 10 de las moradas más precarias, de tal forma a que las mismas no se desmoronen sobre sus ocupantes.
A su vez se solicitó a la subcomisaría que funciona en Yukyty, Itá Enramada, que prohíba el ingreso de carriteros y camiones basureros para arrojar desperdicios en la zona de la laguna.