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El gobernador César Ramírez y el intendente municipal de Curuguaty, Canindeyú, Nelson Martínez Portillo (ANR Añetete) solicitaron, a través de una nota dirigida al ministro del interior Juan Ernesto Villamayor, la barrida total de la cúpula policial en el departamento a raíz de la ola de inseguridad en los últimos días que segó la vida de unos trabajadores, menciona la nota enviada hoy.
“Solicitamos al señor ministro el cambio completo de la cúpula policial del departamento, llámese jefe de orden, Director de Policial, jefes, subjefes y subordinados de puestos de controles, subcomisaría, comisarías e Investigación de Delitos, necesitamos efectivos policiales comprometidos con la institución y con la ciudadanía”, refiriere la nota firmada por el gobernador y el intendente de Curuguaty.
En una parte de la misiva mencionan que los agentes policiales a cargo de la Dirección de Policía están con los “brazos caídos”, lo cual tuvo sus consecuencias que es la inseguridad reinante últimamente.
"Estamos sumamente preocupados política y socialmente por la situación de inseguridad que vivimos en los últimos meses en el departamento, principalmente en Curuguaty y Salto del Guairá”, dice la nota.
“En los últimos tiempos se produjeron violentos asaltos a mano armada con derivación fatal de jóvenes trabajadores colonos ancianos fueron despojados de sus pertenencias y golpeados brutalmente, secuestro niño, asalto con rehenes, robos de vehículos y otros indescriptibles hechos hasta ahora sin ningún tipo de resultados por parte de la institución policial”, refiere la misiva.
En otra parte de la nota dice: “Nuestro departamento siempre se ha caracterizado por ser segura con un ambiente social tranquilo, aspectos que últimamente ha cambiado por la ola de inseguridad, creemos francamente que toda la cúpula de la Dirección de Policía de Canindeyú hace brazos caídos por razones que desconocemos que perjudica gravemente a la sociedad”, indica.
En lo que va del año, cinco personas fueron muertas en diferentes circunstancias violentas, ya sea en asaltos, secuestro entre otros. En la colonia San Juan de Francisco Caballero Álvarez había sido asesinado un joven el 23 de diciembre pasado, luego en Villa Ygatimí un capataz de estancia fue asesinado aparentemente a primeras horas de este año, luego hallado en aguas del río Jejuí mí, otro cadáver hallado en río Aparay en el mismo distrito.
También el asesinato de la mandioquero Amado Lomaqui en el límite entre Maracaná y Guayaybí, ocurrido el 4 de enero pasado y el último caso ocurrido el pasado martes en donde fue asesinado un chofer de un camión repartidor de bebidas en la colonia Campo Aguae, distrito de Curuguaty, en donde malvivientes se llevaron 50 millones de guaraníes.