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Inadaptados incendiaron esta madrugada la humilde Escuela Básica Nº 1.349 “Carlos Antonio López”, de la compañía Cerrito, a unos cinco kilómetros del casco urbano de este distrito. En la institución quedaron totalmente destruidos libros, documentos de los alumnos y de los docentes, pupitres y otros muebles, denunció el director de la escuela, Prof. Hugo Porfirio Arce.
Un aula, en que funcionaba el 5º Grado en la mañana y el Jardín en horas de la tarde, fue totalmente consumida por las llamas. Asimismo, el techo de dos aulas contiguas fue afectado por el fuego. Los docentes no pudieron contener el llanto al ver cómo se ensañaron con la institución, ya que, al no encontrar nada de valor para llevar, los malvivientes quemaron una de las aulas y perjudicaron a otras dos. Los más perjudicados son los niños que llegaron a la escuela y se encontraron con la escena de que sus útiles y la escuela fueron destruidos, manifestó la docente Lic. Rosalba Ávalos.
Agentes de la comisaría local recibieron la denuncia alrededor de las 06:00 aproximadamente, por parte de vecinos que alertaron que la escuela se estaba incendiando. Los efectivos policiales llegaron hasta el lugar en compañía de agentes del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Carapeguá y de esta ciudad. El director de la institución dijo que los desconocidos ingresaron por el techo del aula de Jardín y en el otro salón rompieron la ventana y comenzaron a lanzar todos los útiles y libros por el suelo. Incluso, se llevaron varios bolígrafos y los iban desparramando por el camino vecinal.
Señaló, además, que no es la primera vez que la escuela sufre este tipo de daño. Informó que en ocasiones anteriores ya habían entrado pero solo desordenaron los útiles, pero que esta vez perjudicaron a la institución que prácticamente no recibe ninguna ayuda y a duras penas subsiste con actividades para realizar reparaciones menores. Refirió que ahora los niños quedan sin aula y piden la ayuda de la Municipalidad, la Gobernación, el Ministerio de Educación y de personas de buena voluntad que puedan hacer llegar hasta la escuela pupitres, libros y puedan ayudar para volver a reconstruir las aulas afectadas.