Caso Lichi: imputado exige prueba de ADN

VILLARRICA. La Fiscalía debe acusar al abogado Guillermo Saúl Duarte en el caso que investiga la muerte violenta de la estudiante universitaria Teresa Lichi Rivero. El procesado pidió que se haga la prueba de ADN en el caso.

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La joven desapareció el 17 de abril del 2012 y el 6 de julio pasado fue ubicado un cráneo en un campo del distrito de Ñumí, Guairá, que según el Ministerio Público pertenece a la joven desaparecida. Guillermo Saúl Duarte niega ser el autor de la muerte.

Guillermo Saúl Duarte es el único detenido e imputado en el sonado caso de Teresa Lichi Rivero, oriunda de la ciudad de Coronel Martínez, distrito de Guairá. El abogado, casado, y la joven estudiante mantenían una relación amorosa a escondidas, pero de la cual mucha gente estaba enterada, incluyendo a los padres de Teresa Lichi: Antonio Lichi y Cándida Rivero.

Teresa Lichi Rivero, según los datos, desapareció el 17 de abril del año 2012; sus padres recién denunciaron el casounos 20 días más tarde, acusando a Guillermo Duarte de ser el autor de la desaparición.

El 6 de julio, una pobladora de una compañía de Ñumí halló un cráneo humano incompleto que posteriormente la Fiscalía aseguró que pertenece a la estudiante desaparecida, complicando la situación de Guillermo Saúl Duarte, quien no aguantó la presión de los pobladores y se entregó a la justicia. Actualmente, se encuentra detenido en la cárcel regional de Villarrica, pero niega ser el autor de la muerte de Teresa Lichi.

Es más, Guillermo Saúl Duarte, a través de su abogado, Favio Ramos, duda de que el cráneo sea de la desaparecida y exige que se haga la prueba de ADN para que se tenga la certeza de la muerte de la joven estudiante. El abogado dijo que la reconstrucción odontológica no puede ser concluyente, teniendo en cuenta que el cráneo no está completo, porque le falta el maxilar inferior, sostuvo.

“Solamente pedimos al juzgado la realización de una prueba de ADN para tener la seguridad de que el resto óseo pertenezca a la supuesta victima, pero la querella y la fiscalía se oponen a la diligencia que arrojará un resultado científico”, señalo el profesional. Además, el cráneo siempre estuvo a cargo de la fiscalía, la defensa nunca tuvo acceso al resto óseo, que nunca estuvo lacrado como corresponde, señaló Favio Ramos.

Por otro lado, Ramos refirió que hay muchas mentiras sobre el caso Teresa Lichi. El mismo explicó que nunca se envió un mensaje de texto a una supuesta amiga de Teresa donde ésta explicaba que iba a Asunción a trabajar por 15 días.

El chip de teléfono que se encontró en el auto de Guillermo Saúl Duarte, que está a nombre de Teresa Lichi, es de uso del abogado y nunca estuvo en poder de la joven. Era un número habilitado por la joven para uso de Guillermo Saúl y una vía de comunicación entre ambos, dado que el hombre tiene familia.

El día de la desaparición de Teresa Lichi, la misma intercambió mensajes con muchas personas influyentes (incluyendo a Saúl, hasta las 14:00) hasta las 20:00 del 17 de abril. El abogado aseguró que eso está en el informe enviado por la empresa telefónica.

El abogado Ramos señaló que nunca se encontró restos de sangre en los vehículos peritados, tanto el que pertenece a Duarte como a sus familiares. En los rodados que hasta ahora se encuentran depositados en el Palacio de Justicia no se hallaron evidencias que puedan incriminar al detenido. Se tiene solamente pruebas circunstanciales y no algo directo que prueba probar la culpabilidad del detenido.

Para los padres de la joven, no hay dudas: el autor del crimen de su hija es el exnovio Guillermo Saúl Duarte.

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