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Ocurrió el sábado por la noche. La señora Eulogia Martínez es una artesana indígena y, como todos los fines de semana, iba a Caacupé para vender sus creaciones. Abordó un colectivo de la empresa La Tobateña con su bebé en brazos y su bolso.
Tuvo la desagradable suerte de compartir el colectivo con un puñado de hinchas de Olimpia, quienes colmaron el colectivo y, a medida que subían, contaminaban el ambiente con humo de cigarrillo y cánticos de barrabravas.
“No era una parada, era un lugar oscuro y ahí se bajaron. Tres tipos se llevaron mi bolsa. Escuché un ruido fuerte cuando sacaron mi bolso al bajarse”, contó resignada e impotente. Fue a la altura del km 25 de la ruta II, en Itauguá.
Su bolso estaba ubicado en la parte posterior y ella se sentó unos asientos más adelante, como de costumbre. Lo había hecho antes de que el bus se llenara de barrabravas.
Al percatarse del robo, bajó del colectivo y con ella un pasajero más que se ofreció a ayudarla. Un vecino le indicó que vio a tres sujetos con una bolsa, pero no dio más detalles, por temor a represalias, concluyó.
Acudió a la comisaría de la ciudad, pero dijo que no le prestaron mucha atención en el sitio. Si la hubieran escuchado y puesto atención, habrían recuperado sus pertenencias, su medio de subsistencia, pero solo le tomaron la denuncia, lamentó.
“Contenía fajas, bolsos, pulseras, un montón de cosas. Puse toda mis artesanías ahí. Un millón y medio (de guaraníes) se fue. Ese bolso es oro para mí. Es lo que hacemos para vivir”, lamentó.