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Liana Pizzurno y Santiago García, los jóvenes que quedaron seriamente heridos tras caer de un tobogán gigante en Encarnación, siguen internados en un sanatorio privado de Itapúa, en constante observación de los médicos especialistas. “Amanecieron mejor, la evolución es satisfactoria, pero siempre hay que tener precaución en este tipo de casos”, declaró en ABC Cardinal el Dr. Óscar Bottger.
El médico manifestó que lesiones en el pulmón similares a los que tienen las víctimas tienden a acarrear algún tipo de complicaciones con el pasar de los días, por lo que aún no se aventura a asegurar que ya se encuentran fuera de peligro. “Estamos felices y tranquilos porque ahora están bien, pero hay que ir día por día, siempre pendientes y fijándonos en la evolución”, agregó.
El incidente ocurrió el sábado pasado en Encarnación. Aproximadamente a las 19:30, varias personas cayeron de un tobogán gigante que, debido a los fuertes vientos, empezó a tambalear. Un testigo aseguró ayer que los encargados de la empresa privada apagaron el motor del deslizadero y éste se desinfló con la gente arriba, por lo que, de la desesperación, los visitantes decidieron tirarse.