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El 2 de febrero de 2013, el entonces candidato presidencial general (SR) Lino Oviedo, su guardia Denis Galeano Benítez (45) y el piloto Aureliano Ramón Picco Delmás (45) fallecían luego de que el helicóptero Robinson tipo R44 en que viajaban desde Concepción hacia Asunción se precipitara a tierra.
Un par de meses después, el 27 de julio, otra aeronave del mismo tipo que operaba como taxi aéreo se estrelló en las afueras de la ciudad de Pedro Juan Caballero, mientras se dirigía a buscar un pasajero. En la oportunidad no se registraron heridos.
El Robinson, de fabricación norteamericana, es conocido en nuestro país a partir de aquel accidente ocurrido hace años cuando el entonces presidente de TAM Airlines, Rolim Amaro, perdió la vida al estrellarse ese tipo de aparato cuando lo estaba utilizando como transporte en la zona del Amambay, presumiblemente por desperfectos técnicos.
En todos los casos señalados, los helicópteros estrellados eran del mismo tipo que el de la Policía que se terminó precipitando la mañana de este viernes en la zona de Limpio. De acuerdo a expertos consultados por ABC Color hace un par de años, el helicóptero a pistón Robinson 44 es más operativo para paseos turísticos, control de estancias o transporte de ejecutivos en radios urbanos que para el patrullaje y el control de la delincuencia.
Existe una gran diferencia en la dureza de la estructura entre máquinas a pistón, el Robinson 44, y las máquinas a turbina. Estas últimas vienen preparadas de fábrica para soportar cualquier tipo de utilidad, incluso para transporte de tropas o de heridos, por su mayor capacidad. El aparato con motor turbinado, conforme a los expertos, podría aterrizar en medio de dos intersecciones de avenidas o calles o un patio baldío. En cambio, este tipo de maniobras resultaría dificultosa y hasta arriesgada para el Robinson.
En internet existen varios videos que muestran la inestabilidad que caracteriza a estos helicópteros, que carecen de fuerza estática. En uno de los videos, la aeronave se termina precipitando mientras despegaba, luego de que una de sus hélices rozara ligeramente la puerta de un hangar. Otra filmación muestra la manera en que se estrella un Robinson perdiendo estabilidad justo en el momento en que vuela bajo a pocos metros de una zona selvática. Uno de los sobrevivientes relataba que el problema no fue la falta de combustible, ya que tenían medio tanque y el cielo se encontraba despejado.
El piloto, por su parte, explicó que perdió velocidad y en ese momento se desestabilizó el aparato y que su única salida era darlo la vuelta, pero en ese ínterin ya estaba por debajo de los árboles. Este helicóptero en particular tiene serie limitaciones para vuelos nocturnos y de ninguna manera debe despegar en condiciones climáticas adversas. No es siquiera comparable la diferencia entre la preparación de una estructura de un Robinson 44 y otras máquinas turbinadas en cuanto a la seguridad en vuelo en tormentas, tempestades, vientos fuertes, ya que el Robinson 44 no presenta una estructura preparada para estas adversidades, dicen.