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En referencia a la crisis que atraviesa actualmente el Cuerpo de Bomberos Voluntarios del Paraguay, específicamente por la investigación abierta en el Ministerio Público por supuestos actos de corrupción, el capitán Rubén Valdez dijo que “lo importante es que la institución nunca dejó de prestar servicio a la comunidad. Los problemas administrativos no afectaron a los operativos”.
Dijo que están prestos a colaborar con la justicia, como ya lo demostraron, pero enfatizó que los problemas administrativos deben ser dilucidados en ese ámbito. En este sentido, lamentó que, aunque la parte operativa no se haya alterado, no ocurrió lo mismo con la imagen de la institución, que sí quedó afectada.
“Si alguien hizo algo inadecuado, tiene que responder; la institución no puede hacerse cargo de las responsabilidades que son particulares. La institución se hace cargo de los procedimientos y de la operatividad de las personas”, remarcó. Finalmente, garantizó que “estos problemas no deben ni van a influir en nuestro ánimo de servicio”.
De acuerdo a la denuncia, el Cuerpo de Bomberos Voluntarios tiene ingresos propios y recibe además unos G. 1.000 millones del Presupuesto General de la Nación. Este dinero lo utiliza en un 50% aproximadamente para el pago de salarios de los empleados administrativos que trabajan en el Directorio Nacional.
La otra mitad debería invertirla en sus compañías, que son alrededor de 75; sin embargo, el Directorio estaría declarando falsamente que utiliza el fondo restante para el pago de salarios de empleados de las compañías de bomberos.