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Sienna SA comunicó al juzgado que los granos de su propiedad fueron cultivados dentro del inmueble que pertenece a la familia Raiter, ubicada en la colonia Tirol, Itapúa.
La jueza Mafalda Cámeron Luque, en respaldo a la sentencia Nro. 3/17 “hacer lugar a la demanda promovida por la firma Sienna SA en la que declara que toda la producción de la zafra 2016 – 2017 pertenece a la sociedad anónima” dictada el pasado 19 de enero, impuso una medida cautelar sobre los granos cultivados por Sienna SA y libró el oficio correspondiente a la Policía Nacional.
Según nuestra legislación, los granos pertenecen a quién cultiva. En este caso específico, los Raiter cedieron su inmueble a Siennsa SA para plantar soja pero no tienen relación con la producción del grano.
En la tarde de hoy, martes, la jueza Julia Rosa Alonso Martínez, del juzgado civil del quinto turno, habría firmado un auto interlocutorio donde anula de oficio la sentencia definitiva firmada por la jueza Mafalda Cámeron Luque.
La magistrada Julia Rosa Alonso Martínez ingresó de turno en la mañana de hoy. A eso de las 15.30 se habría presentado en la vivienda particular de la actuaria judicial Rossana Frutos para exigirle que firme el auto interlocutorio.
La jueza Alonso Martínez no tiene ninguna atribución para anular de oficio una sentencia definitiva, esta potestad es exclusiva de los tribunales de apelación.
Ambas tienen el mismo grado y nivel de competencia. Julia Rosa Alonso Martínez carece de toda atribución para suspender de oficio la sentencia definitiva firmada por Mafalda Cámeron Luque.
El documento firmado por la actuaria Rossana Frutos, en su casa, fuera de horario laboral, sería entregado mañana a la Policía Nacional. El autointerlocutorio también ordenó levantar la medida cautelar.
La jueza Julia Rosa Alonso Martínez es la misma que el 26 de diciembre de 2016 otorgó una medida cautelar a Agro Silo Santa Catalina para secuestrar granos pertenecientes a Marino Raiter y de oficio ahora anuló una sentencia definitiva y las medidas cautelares dictadas por un juzgado de igual rango dentro de la estructura del Poder Judicial.
Detrás de esta aberrante situación se encuentran el Grupo Favero y el senador Oscar González Daher, presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados. Si de algo puede estar segura la jueza Julia Rosa Alonso Martínez es que su despropósito legal no tendrá consecuencias en el Jurado de Magistrados. Habría que ver si la barrabasada que cometió fue gratis.
Agro Silo Santa Catalina SA, cuyo titular es Lucas Marini Favero, integra el Grupo Favero y reclama a Marino Raiter y Mariline Penkal de Raiter el pago de 23 millones de dólares que surgieron de la falsificación de sus firmas.
El senador Oscar González Daher estaría operando dentro del Poder Judicial para imponer acciones “legales” que permitan al Grupo Favero cobrar 23 millones de dólares que surgieron de un acto ilícito.
El esquema delictivo estaría integrado también por dos escribanas: María Teresa Rodríguez y Nélida Chávez quienes serían responsables de falsificar las firmas del matrimonio Raiter.
Nélida Chávez es la esposa del senador Oscar González Daher.