Dicha disposición había sido resuelta por el Consejo de Superintendencia y fue ratificada este martes por el máximo tribunal.
El documento dispone que los funcionarios judiciales deban brindar un buen trato al público en general y, asimismo, restringe el uso de celulares en horarios y lugares de trabajo.
También se ratificó en cuanto al uso del uniforme y del carné identificatorio, así como la llegada puntual a los puestos de trabajo, según el informe publicado en el portal Judiciales.net
Asimismo, se dispone que los inspectores de la Dirección de Administración del Personal verifiquen el estricto cumplimiento de estas disposiciones y, asimismo, están obligados a elevar un informe semanal al Consejo de Superintendencia, con los datos de aquellos funcionarios que infrinjan dichas decisiones.