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Solicitan que se agilicen los trámites para los controles pertinentes y la reactivación de las actividades de la fábrica ante el temor de perder sus puestos de trabajo.
La fábrica está parada desde junio pasado por exigencia de la Seam, para adecuar sus instalaciones y evitar la emisión de olores que molestan a la población.
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En la fábrica trabajan más de 100 empleados en distintas áreas y la empresa se vio obligada a notificar a más de 60, considerando la difícil situación financiera que atraviesa por la falta de producción.
Conforme a los datos de los técnicos de la compañía electrointensiva franco-brasileña, la fábrica aguarda la autorización del ente estatal para seguir con las instalaciones exigidas a fin de reactivar las operaciones.
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Los directivos de la empresa habían anunciado una inversión superior a US$ 500.000 para la instalación de un complejo sistema de mitigación de olores que se emiten en el proceso de producción de carburo de silicio.
Los funcionarios de Archer SA esperan que el ministro del Medio Ambiente agilice los trámites para no perder sus puestos de trabajo, que les sirven para mantener a sus familias.
Representantes de los funcionarios fueron recibidos por el ministro Ariel Oviedo y expusieron la situación de la fábrica. Recibieron la promesa de que se agilizarán los trámites para realizar la medición de la calidad del aire y seguir con las tareas de adecuación para reactivar la producción.