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Talavera ratificó su testimonio y volvió a confirmar que “Papo” Morales fue el que lo amenazó y torturó a punta de un fusil de guerra el pasado 22 de junio del año pasado a orillas del río Tebicuarymí, en la compañía de Rojas Potrero, ciudad de Borja, en el límite con Iturbe.
El agente fiscal de la causa, tras la audiencia, dispuso que Talavera sea inspeccionado por el médico forense de la institución para determinar si realmente sufrió un refilón en la cabeza, tras los disparos intimidatorios hechos por Morales.
Posteriormente será atendido por la psicóloga, con el fin de adjuntar más pruebas al expediente.
Papo Morales está imputado por intento de homicidio doloso, coacción grave y violación de la ley de armas.
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Ayer, lunes, Antonio Talavera llegó hasta los estudios de ABC TV y relató el conflicto que tenía con Papo Morales por la prepotencia de este último, que desencadenó en el video de la tortura que se hizo viral.