Cargando...
Basilio Argüello es oriundo de la compañía Costa Jhu del distrito de Pirayú. Tuvo la dicha y la bendición de festejar ayer sus 101 años de vida. Su inmensa lucidez y envidiable memoria lo hacen prometer cumplir muchos años más.
Conversar con el abuelo no fue difícil, ya que no cuenta con mayores problemas de salud y tiene un gran sentido del humor. Contó que el secreto para vivir tantos años y con buena salud es alimentarse bien. Don Argüello recomendó consumir coco, poroto, mandioca y mucha leche para mantener la vida y la salud.
Enviudó a los 84 años. Estuvo casado con doña Elisea Vera de Argüello durante 46 años. En su vida de estudiante se destacó en matemáticas. Don Argüello dijo que la vida de antes y la de ahora son muy distintas. Explicó que antes había mucho respeto y los padres podrían controlar a sus hijos, mientras que actualmente los adolescentes viven sin reglas y sin respeto a ellos mismos y mucho menos a sus progenitores.
Recomendó a los padres controlar a sus hijos, sacarles en algunas ocasiones el celular, que -según el longevo- destruyó a la juventud actual. Pidió a los más jóvenes respetar a sus mayores y, sobre todo, recomendó a las mujeres respetarse a sí mismas.
Entre otras anécdotas, recordó que vivió tranquilo durante la Guerra del Chaco (1932-1935), ya que se quedó a cuidar de su madre y su hermana menor, mientras que sus dos hermanos se fueron a la contienda. Al término, uno de ellos regresó y el otro quedó en el Chaco y no supieron nada más de él.
Don Basilio es fiel al Partido Liberal, pero destacó el Gobierno de Alfredo Stroessner como uno de los mejores: “Ohayhuva´ekue la mboraihupe, hepy la mandi´o ha la cosecha itiempope, la mba´e vai ojapova iministro del Interior, Montanaro, pea ha´e la sarambi apoha ndaha´ei Stroessner” (Le quería a los pobres, era cara la mandioca, la cosecha era cara en su época, el que hizo muchas cosas malas fue su ministro del Interior, Montanaro, ese es el que hacía el desastre), afirmó.
Por último, dijo que los hombres deben trabajar y no vivir del trabajo de las mujeres, como sucede en muchos casos de la actualidad. “Hay que trabajar para comer, labrar la tierra para tener plata. El hombre debe salir a trabajar”, enfatizó.