Ferreiro admite molestia y eventual quiebre

El escándalo de tráfico de influencias en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados también tiene sus consecuencias en la oposición. El senador Adolfo Ferreiro, involucrado en audios, reconoce el disgusto, porque le sacan en cara el caso.

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El senador Adolfo Ferreiro, referente de la Concertación Avancemos País, reconoce que existe un disgusto porque referentes de la Alianza Ganar a los que son afines le siguen cuestionando por la conversación con Raúl Fernández Lippmann y Óscar González Daher, en el caso de los audios filtrados que desnudaron el tráfico de influencias en el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados.

“Claro que sería difícil (un relacionamiento en la Alianza), porque nosotros estamos en un proceso político donde las cosas que se hagan tienen que tener que tener una coherencia mínima de comportamiento. Nosotros creemos que no hay motivos para una sanción. Estoy seguro de que si voy a juicio no me pueden sancionar”, indicó Ferreiro con respecto a las críticas de referentes de la oposición como Desirée Masi, del Partido Democrático Progresista (PDP).

Afirma que, a estas alturas, los cuestionamientos ya no son de carácter “jurídico” sino “electorales”, dado que en varias ocasiones pidió ser investigado y aún no le notificaron de ninguna acusación formal.

“Si por un condicionamiento de carácter electoral se cree que se puede cometer una injusticia o una decisión lesiva para tu sector o una persona que está contigo, cómo le vas a acompañar a alguien en ese proceso”, consideró, reconociendo que las críticas podrían generar el alejamiento de un sector de Avancemos País de la Alianza.

De hecho, aclaró que la concertación que integra no apoya a pleno la Alianza, sino que Ganar, que postula a Efraín Alegre y Leo Rubin para la presidencia, es respaldada por algunos partidos.

“Está muy claro que la molestia en Avancemos País es el manejo que se está haciendo con la cuestión, que no se está haciendo. Lo que yo he pedido como un requisito básico de fraternidad es que si me van a acusar, que me acusen, pero que me digan de qué y que me den la posibilidad de defenderme en un juicio que no sea como el de Lugo”, insistió Ferreiro. En concreto, pide que sus compañeros lo acusen formalmente o desistan de hacerlo.

Reiteró que, supuestamente, no realizó tráfico de influencias, sino que “sondeó” sobre un juez y que sus adherentes entendieron sus explicaciones públicas. “El tribunal público, el que se da en la calle, está funcionando activamente porque nadie me negó ir a un acto. Que cada quien saque su conclusión, yo no tengo problema con eso”, dijo.

Sobre el audio reiteró: “Quería saber si este juez de quién dependía y averigüé no solo con Fernández Lippmann sino con otros senadores también y todos me dijeron que es un juez independiente, criterioso, respetable, entonces le vine a decir al abogado que me vino a pedir auxilio: 'Confiá en este juez, parece que es una persona responsable', o si no le habría dicho 'recusalo o denuncialo al Jurado de Enjuiciamiento'”.

En comunicación con ABC Cardinal, a Ferreiro se le consultó además sobre un audio en que se lo escucha mantener una fuerte discusión con Camilo Soares, referente del P-MAS, en que incluso lo manda a callar. Ferreiro dijo desconocer ese audio. Soares, por su parte, expresó que cuando estaba en el mismo grupo político con Ferreiro siempre tuvieron discusiones acaloradas y también siempre le cuestionó su cercanía con Óscar González Daher.

“Siempre le decía que esa relación que tenía Adolfo con González Daher dentro del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados era como que se pasó teniendo una relación casi de chongos, eso para mí era inexplicable”, dijo Soares.

“Para mí, inentendible era la relación que tenía con González Daher y después el manejo político en la Municipalidad de Asunción, donde ahora Adolfo tiene un peso desproporcionado que mete y saca gente”, acusó el dirigente del P-MAS.

El P-MAS tampoco integra formalmente la Alianza Ganar, pero está tratando de acordar algunos puntos programáticos para un respaldo formal. Soares minimizó las diferencias en la oposición y dijo que la ANR tuvo confrontaciones más fuertes y nunca se le cuestionó. 

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