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Romero indicó en conferencia de prensa que el sistema de transmisión de energía se encuentra “relativamente bien” y que es el área de distribución el que sigue acarreando inconvenientes.
Reiteró que los cables desnudos -a la intemperie y en zonas arborizadas- sufren los efectos de las lluvias y tormentas causando cortes de energía en varios sectores. Expresó que estas vías de transmisión deben ser subterráneas y no áereas.
Dijo que para este 2013 se planea una inversión de más de US$ 450 millones para atender la demanda energética ante el “crecimiento vegetativo de las familias” y que, poner en condiciones el obsoleto sistema de distribución, demandaría más del triple de esta cifra.
Sobre las prioridades, Romero indicó que “hay que ir por parte”, atendiendo el crecimiento de la demanda y, posteriormente, ir mejorando a través de posibilidades de financiamiento.
La ANDE se prepara para enfrentar los meses de diciembre, enero y febrero, los de mayor demanda de energía.