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Con los avances en la construcción de la bicisenda, la pregunta que muchos se hacen al transitar por la calle Iturbe es qué pasará con los espacios reservados por los que se se abonan anualmente a la Municipalidad de Asunción, y que ahora interfieren con el trayecto destinado a los ciclistas.
El director de Tránsito, Luis María Pereira, explicó que los espacios fueron entregados a los usuarios con la condición de que una vez concretados los trabajos de la bicisenda, aquellos debían ser reubicados, o, en su defecto, si el cliente ya no desea contar con el servicio, se le proporciona un crédito fiscal para que el monto sobrante sea destinado al pago de sus impuestos.
“Esta situación estaba prevista, es un proyecto que se venía manejando desde el comienzo de esta administración. Fue condicionada a concesión. Una vez implementado el proyecto se pierde ese concesión o se les da una reubicación. Normalmente los usuarios piden una reubicación”, explicó el director de Tránsito de la Comuna asuncena.
El costo actual de un espacio reservado en zonas de alta demanda es de G. 2.303.500, mientras que en zonas de baja demanda es de G. 1.479.700.
Con respecto a algunos errores que se están notando en el tramo de la bicisenda, como por ejemplo los desniveles a causa de los desagües, el jefe del departamento de Proyectos Urbanos, Nicolás Chaparro, explicó que “estos se tratarán de nivelar al máximo posible”.
En relación a la curva existente en Palma a Iturbe, que genera confusión pues los usuarios dudan por dónde deberán continuar las bicicletas, Chaparro explicó que se procedió a derrumbar parte de la isleta y se eliminó la rampa en esa esquina, para abrir el camino. Aseguró en todo momento que estas acciones estaban previstas desde el comienzo del proyecto.
En cuanto a las quejas de algunos conductores de vehículos, que comentaron que los “ojos de gato” ya están perjudicando a sus automóviles, pues tienen un relieve considerable que llega a golpear los coches, el director de Tránsito Luis María Pereira reconoció que existen ciertos errores por parte de la empresa constructora, pero que iniciaron un proceso de revisión para ir corrigiendo las imprecisiones por el camino.