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“Las industrias queseras que intervienen en la producción de queso tienen más problemas porque están más afectadas por los caminos difíciles: están produciendo muy poco queso”, explicó Erno Becker, presidente de la Cámara Paraguaya de Industriales Lácteos (Capailac), en comunicación con ABC Cardinal.
También hay escasez de leche, que se debe a que las lluvias afectan el acopio y la alimentación de los animales vacunos. “Hay que orar porque terminen las lluvias y que salga el sol para que nuestras vaquitas puedan comer algo más sólido”, añadió.
“El precio podría seguir subiendo. Nosotros en consenso en la cámara tratamos de no dejarnos llevar por el momento de subir por las nubes, porque eso no es saludable, buscamos regular lo más posible”, declaró.
Durante el invierno hay una subida casi cíclica y en verano cuando la materia prima sobra es probable que vuelva a bajar. Comentó también que en Argentina están faltando también productos lácteos por las inundaciones y “por la política de gobierno que aniquiló la lechería”.
Paraguay llegó a exportar hasta un 80% por los productos excedentes, pero perdimos casi todas esas exportaciones por escasez del producto, según expresó. Becker afirmó además que el trabajo de la leche es muy sacrificado y "el que puede, se escapa".
Comentó que ahora hay una industria ya preparada en el Chaco para la producción de leche en polvo y leche condensada para el consumo interno que “no está arrancando porque no tenemos leche”.