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El viceministro de Administración Financiera de Hacienda, Óscar Llamosas (ministro sustituto en ausencia de Lea Giménez), señaló esta mañana que numerosas instituciones empezaron a plantear una ampliación del plan financiero.
Adelantó que hoy no se concederá ningún pedido porque la medida se aplica desde febrero y que recién a mediados del año se podría hacer una revisión general, aunque abrió la posibilidad de estudiar aquellos casos particulares que así lo ameriten.
El plan financiero del Presupuesto 2018 por decreto del Poder Ejecutivo se puso en vigencia el 22 de febrero último y contempla un recorte de unos US$ 80 millones en gastos financiados con recursos del tesoro.
La reducción se adoptó teniendo en cuenta los incrementos salariales aprobados en el Congreso y las sentencias de la Corte Suprema de Justicia que exoneran del IVA a las cooperativas y devuelven el IVA crédito a las firmas agroexportadoras, que restan recursos al Tesoro Nacional.
El plan financiero es una herramienta legal que utiliza Hacienda para alinear los gastos a los ingresos disponibles en materia de recursos del Tesoro (principalmente impuestos) y evitar que el déficit se dispare por encima del tope de 1,5% fijado por la ley de Responsabilidad Fiscal.
Los recortes afectan a las entidades dependientes del Poder Ejecutivo, no así al Poder Legislativo ni al Poder Judicial, porque estos manejan su presupuesto con autonomía.
El viceministro Llamosas también señaló que están esperando los recursos generados con la licitación de la Conatel de más de US$ 84,5 millones, realizada a inicios del año, para poder utilizar los fondos en los gastos presupuestados.
De acuerdo a lo que se informó en su momento, Hacienda debía recibir la totalidad de los fondos en 60 días (US$ 45 millones ya fueron adelantados por las telefónicas que participaron de la subasta), que según la Ley N° 5.562/15 “serán destinados a financiar gastos del Presupuesto General de la Nación”.