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El diplomático del Vaticano se reunió ayer con el clero diocesano y el obispo renunciante, monseñor Mario Melanio Medina. El encuentro tuvo lugar en la Curia Diocesana de San Juan Bautista de las Misiones.
Tras la reunión monseñor Eliseo Ariotti señaló que el nuevo obispo debe ser un pastor, guía y maestro.
“Que tenga olor a oveja así como pide el papa Francisco, que sepa interpretar los deseos de sus feligreses y que lo ideal es que tenga capacidad de defender a su pueblo. No es un misterio la reunión con el clero. Estamos en el tramo final para dar informaciones al Santo Padre quien designará un nuevo obispo a la diócesis de San Juan Bautista de las Misiones”, dijo monseñor Ariotti.
Añadió que monseñor Medina presentó renuncia, en octubre de 2014, a los 75 años, ajustándose al Derecho Canónico. El santo padre ha aceptado, pero le ha dicho a Medina “tu estás allí hasta la designación del nuevo obispo”.
Señaló que el nuncio apostólico tiene que dar informaciones al santo padre y que con ese propósito vino a hablar con los sacerdotes de la Diócesis, quienes están en el terreno de la evangelización.
“Muy serenamente hemos analizado cuales son las necesidades más urgentes de ésta Diócesis”, dijo el nuncio.
Subrayó que el perfil debe ajustarse teniendo en cuenta la realidad de la Diócesis y a los antecedentes de los anteriores obispos como monseñor Ramón Pastor Bogarín Argaña, monseñor Carlos Milciades Villalba y monseñor Mario Melanio Medina.
Monseñor Ariotti dijo que existen candidatos de diferentes diócesis del Paraguay, al tiempo de señalar que una vez presentado la terna, la Nunciatura tiene que elevar al Santo Padre, quien junto a sus consejeros cardenales elegirá al nuevo obispo de Misiones y Ñeembucú.
Por su parte, monseñor Medina señaló que el diálogo entre el nuncio Ariotti con el clero, demuestra el espiritu de apertura del papa Francisco.
“Es algo nuevo en la Iglesia para conocer la realidad de las Diócesis y buscar el perdil adecuado para la designación de un nuevo obispo”, dijo Melanio Medina.
Explicó que la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) deberá presentar la terna al Nuncio Apostólico y que luego la Nunciatura deberá elevar al papa Francisco.
Añadió que se busca el perfil de un obispo que tenga apertura, cercanía, estar con la gente y que sea un pastor que sepa escuchar y recibir a los fieles, sin discriminación, incluso debe aceptar a los que se automarginan, porque todos son miembros de la Iglesia, indicó.
Aclaró que si bien algunos fieles separados o amancebados no pueden recibir los sacramentos, igual tienen que ser aceptados en la iglesia, dijo monseñor Medina.
Señaló que va a seguir al frente, con el mismo dinamismo y esfuerzo hasta el Santo Padre designe un nuevo sucesor.