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Josías, de un año y medio de edad, fue intervenido quirúrgicamente el 23 de abril pasado en el Hospital Nacional Acosta Ñu, oportunidad en la cual recibió un nuevo corazón.
Desde entonces, con avances y retrocesos, inició por el camino de evolución y se encuentra a una semana del alta médico.
“Él está bien, evoluciona bien. El fin de semana pasado sufrió un cuadro bronquial leve, pero lo va superando”, explicó la cardióloga Nancy Garay, en comunicación con ABC Color.
Agregó que la semana próxima ya habrá noticias positivas respecto a su alta médico.
Por otro lado, Brian, de 6 años, sigue internado en el Sanatorio Médico Bautista, recuperándose bien de la operación que le fuera practicada el 27 de abril pasado.
“Está evolucionando bien. Está todo bien su corazón. Lo que se le está haciendo de a poco son trabajos de fisioterapia. De acá a un mes me dicen los doctores que se podrá analizar ya su alta médico”, dijo Eleuterio Amarilla, padre del menor, en contacto con nuestro diario.
Sin embargo, existe una lista de personas que aguardan con ansia un donante. Es el caso de Fabricio Daniel Caballero, de dos años de edad, quien sigue internado en estado grave en el Instituto de Previsión Social (IPS).
“Fabricio se encuentra siempre grave, con pocos cambios realmente. Depende de un respirador”, manifestó Óscar Franco, médico que lo atiende en la previsional.
Indicó que el menor se encuentra en estado delicado desde hace dos meses, y los doctores esperan un corazón para que le sea trasplantado.
En la espera de un donante, falleció semanas atrás Nelson Lisandro Galeano, de dos años, en el Acosta Ñu.
Otros niños que suman la lamentable lista son Anita Almirón, de 6 años, quien padecía una grave enfermedad y esperaba un corazón, misma situación que derivó en un trágico final para la niña Liz Karina Herrera Martínez.