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El legislador liberal fue uno de los que aprobaron ayer el “regalo” de G. 12.600 millones -dinero de los contribuyentes- para un tercer aguinaldo a los funcionarios de Diputados y gratificaciones a empleados de ambas Cámaras.
En conversación con radio ABC Cardinal, Acosta se mostró sumamente “arrepentido” ante la indignación que su postura y la de sus colegas generó en la ciudadanía. “Se votó, pero cuando uno ve la indignación de la ciudadanía... Hay que corregir esto”, manifestó.
Al cuestionársele por qué avaló este zarpazo al presupuesto, argumentó que ni siquiera analizó en detalle el tema antes de votar durante la sesión. “No analizamos a profundidad; tal vez acompañé esto cuando se presentó la situación de las inequidades, por el microclima que se vivió ayer con las supuestas inequidades entre las instituciones”, refirió.
Insistió en que se guió por los comentarios de que hay entidades, como el Ministerio de Hacienda, donde existen beneficios adicionales para los funcionarios. “Primó ayer que cuando hay una institución que cobra (estos beneficios extra), ellos (los funcionarios de la Cámara Baja) también pueden cobrar”, apuntó.
Aseguró que, al presentar el proyecto en cuestión, se señaló que hay instituciones que inclusive cobran hasta cuatro aguinaldos al año. “Se puso eso de la inequidad y se votó; si eso se debe rectificar, te aseguro que vamos a rectificar nuestra postura”, manifestó.
El diputado lamentó que actualmente ya el tema esté en otra instancia, es decir en el Senado. Sin embargo, garantizó que en caso de ser rechazado el punto en la Cámara Alta, él y otros colegas suyos se encargarán de mandar al archivo el documento. “Ojalá que el Senado lo rechace y eso vuelve a Diputados; claro que no solo yo, sino muchos seguramente vamos a votar aceptando el rechazo”, aseveró.
Ante las numerosas críticas y expresiones de repudio en su contra y los otros legisladores que votaron por este “regalo” a los funcionarios del Congreso, insistió en que “esto ahora ya no está en nuestras manos. Cuando uno se equivoca, tiene que reconocer, pero esto ahora está en otro escenario; no tuvimos que haber causado todo esto, tal vez... Es nuestra obligación considerar el bienestar general por sobre el particular”, reconoció.