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Supuestamente, la maquinaria se encontraba en plena tarea de limpieza en un predio de unas 100 hectáreas, al parecer violando leyes ambientales. Utilizan combustible adquirido por la Comuna con dinero de los contribuyentes, refieren.
Para corroborar la denuncia de los lugareños acudimos al lugar indicado, en donde efectivamente la pala cargadora de la Municipalidad de Capiibary estaba trabajando en destroncar el predio, perteneciente a la familia Venialgo. El operador de la máquina confirmó que fue enviado en el lugar por disposición del intendente Juan Andrés Toledo (ANR). “Soy un simple empleado, cumplo ordenes”, refirió el funcionario.
Explicó que, según se enteró, se cobra G. 250.000 por hora y normalmente trabaja ocho horas, lo que significa una ganancia de alrededor de G. 2 millones por día, dinero que no se sabe si ingresa al arca municipal. Existe una fuerte sospecha de que todo va a parar al bolsillo de personas particulares.
Según el operario de la máquina, desde hace una semana la pala se encuentra realizando los trabajos en el lugar. Se denunció también la mala utilización de una camioneta municipal por parte del concejal municipal del Unace Edilberto Irala, quien supuestamente de noche usa el rodado para fines particulares.
El intendente Toledo no atendió a nuestra llamada y no estaba en la Municipalidad cuando acudimos para obtener su versión.