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La estación de servicios está ubicada sobre la Autopista Ñu Guasu, que fue construida por la administración anterior. Las nuevas autoridades de Petropar detectaron que la obra tenía fallas estructurales que permitieron que se filtren al medio ambiente unos 2.700 litros de hidrocarburos que fueron a parar a la cuenca del arroyo Itay y los humedales del Parque Guasu Metrolitano, aledaños a la estación.
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La obra fue licitada en 2015 y adjudicada y terminada en 2017, aún durante la administración del anterior gobierno, cuando Eddie Jara estaba al frente de Petropar y las empresa adjudicada fue Z & Zarza Constructora, a nombre de Jorge Zarza. No obstante, Miguel Cáceres, asesor jurídico de la institución denunciante, aclaró que presentaron la denuncia de manera innominada para que la Fiscalía investigue.
No obstante, según indicó Cáceres, una fiscalización confirmó "falencias estructurales y que definitivamente hubo una perdida de combustible" que se filtró por debajo del hormigón, fue al suelo, pasó al desagüe pluvial y esto "implica que cae en el arroyo Itay, que está a metros".