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La fiscala Claudia Alonso, quien estuvo a cargo del operativo, dijo que acudieron al lugar tras recibir una denuncia a la que dieron seguimiento, lo que permitió la incautación del gasoíl que sería fruto del ordeño de los buques que navegan por los ríos de la zona.
Tras corroborar el hecho, se dio participación a la Prefectura Naval del lugar. El buque se encontraba oculto en un sitio de difícil acceso y bien disimulado por la vegetación del lugar. Además del “lanchón fantasma” que no tenía matrícula ni nombre que lo identifique, fueron decomisadas baterías, mangueras, motobombas y otros elementos que serían de uso de los "ordeñadores".
A los intervinientes les llamó la atención que el personal de la Prefectura no haya advertido la presencia de la embarcación, que se encontraba a escasa distancia de la base naval de Ita Pirú. Los elementos requisados durante el operativo quedaron bajo la guarda de la Prefectura Naval de Paso de Patria.
El departamento de Ñeembucú es una zona propicia para la actividad de los ilegales, considerando la gran cantidad de ríos y arroyos que facilitan la operación de los ordeñadores. El combustible ordeñado en esta parte del país es comercializado en los departamentos del Sur e incluso lo que se descarga en la zona norte (Alberdi, Villa Franca y Villa Oliva) tendría como mercado principal el departamento Central y la capital del país.
Lamentablemente, la falta de oportunidades y el abandono del departamento por parte del Estado paraguayo hacen que el ordeño de combustible y su comercialización sean vistos prácticamente como una actividad laboral común en el Sur, que requiere urgentemente de inversiones del sector público y privado para evitar que esta zona replique la experiencia de otras que son manejadas por los delincuentes.