De la peluquería al taller

Lozenir Kich es una mujer que trabajó durante 14 años en un salón de belleza y ahora se dedica a un rubro completamente opuesto: arregla faros en un taller. Alienta a las demás a que no crean que este tipo de labores pertenece solo a los hombres.

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Un taller mecánico con repuestos para vehículos y herramientas es ahora el entorno laboral de Lozenir Kich, quien después de haber trabajado por mucho tiempo en la tarea de poner más bellas a otras mujeres, ahora se dedica a arreglar la estética, pero en este caso, de los faros correspondientes a los automóviles.

Kich relató a ABC Tv su drástico cambio de funciones cuando conoció a un mecánico de faros de quién se enamoró y aprendió esta actividad. “Siempre fui un apersona muy activa, siempre me gustó trabajar y después cuando veía que él hacía los faros, me interesó, me gustó por el trabajo manual que tiene. Para mí es la misma cosa que trabajar en una peluquería, yo le trato como a una señorita que le tengo que arreglar y mejorar”, expresó.

Esta mujer que realiza este trabajo en Asunción tiene clientes ya en varios puntos del país como Concepción, Pedro Juan Caballero, Encarnación, Ciudad del Este e incluso algunos de Brasil y Argentina, según informó la periodista de ABC TV Flavia Borja.

Lozenir Kich aconseja a todas las mujeres que no piensen que este es un trabajo solo para hombres, teniendo en cuenta que ese concepto ya quedó en el siglo pasado. “Algunos me dicen que somos mejores que los hombres porque somos más detallistas y más delicadas, acotó. Por otra parte, dijo a los hombres que se acostumbren 'porque las mujeres ahí estamos llegando'”, concluyó.

 

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