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Alrededor de las 09:30 llegó a Fuerte Olimpo una comitiva proveniente de la capital del país encabezada por los diputados José Domingo Adorno y José “Pakova” Ledesma. Los legisladores son acompañados por el obispo del Chaco, monseñor Gabriel Escobar; el intendente de Fuerte Olimpo, Sergio Cuéllar; concejales departamentales y municipales.
La comitiva llegó a la zona a fin de interiorizarse sobre los graves hechos de tortura y represión que habrían ocurrido el día de ayer en la localidad de Puerto Guaraní, a unos 30 km del casco urbano de Fuerte Olimpo, de acuerdo a la denuncia de un grupo de sin tierras.
Primeramente, la comitiva fue hasta la Jefatura de Policía, a fin de interiorizarse de los hechos. Allí fueron recibidos por el jefe de Orden y Seguridad, comisario Miguel Orué, a quien increparon duramente por el hecho sucedido en el día de ayer, atendiendo que la actuación policial fue totalmente nula. El uniformado respondió diciendo que no sabían absolutamente nada y los hechos sindicados como represión contra los pobladores fueron realizados por policías pertenecientes a la APER, a cargo del subcomisario Freddy Osorio.
Precisamente en ese momento fue que el obispo criticó al uniformado, quien le señaló que ellos como “dueños de casa” deberían interiorizarse de lo que ocurre en la zona. La crítica fue generalizada también por parte de los políticos.
El uniformado comentó que se realizó en la comisaría local una denuncia por parte de la presidenta de la comisión de sin tierras, Carmen González, quien fue una de las que supuestamente recibió la feroz golpiza de parte de Julio Alcaraz, apoderado de la empresa Abialor S.A., dueña de las tierras en conflicto.
Posteriormente, la comitiva se trasladó al hospital regional a fin de visitar a las personas que aún se encontraban en el nosocomio y que fueron víctimas, algunos de la feroz represión policial y recibieron balines de goma; y otros, como la dirigente, que denunció haber sido golpeada por el apoderado de la empresa de origen francés.
Luego, la comitiva se dirigió hasta la zona de Puerto Guaraní, donde los pobladores exhibieron el lugar en el que se realizó la brutal represión. En estos momentos, participan de una reunión con los pobladores de esta comunidad, a la que asisten hasta los alumnos de la institución educativa de la comunidad, ya que las clases fueron paralizadas como consecuencia del grave acontecimiento.
Durante su alocución, el obispo del Chaco lanzó duras acusaciones contra el apoderado de esta empresa luego de haber recibido en forma pormenorizada los detalles de cómo fue torturada la mencionada mujer. El religioso señaló que están luchando por algo que les pertenece y la única forma de ayudarlos es que las autoridades realicen un trabajo en forma conjunta. Criticó la ausencia de algunos representantes del pueblo como la propia gobernadora, Marlene Ocampos, aunque no dio a conocer nombres.
Las críticas también fueron dirigidas contra el accionar de la Policía, que se convirtió prácticamente en verdugo de la gente, de acuerdo a la comitiva. Acusaron tanto a los efectivos de la APER, por la brutal represión, como los de la zona que no hicieron nada para defender a los pobladores.
El diputado Adorno criticó de forma airada al propio comandante de la Policía, Francisco Alvarenga, ya que en una reunión que mantuvieron ayer en horas de la tarde, éste emitió una orden de que en forma inmediata los uniformados de la APER se retiren del lugar del conflicto y permanezcan en la comisaría de Fuerte Olimpo. Esta orden no fue acatada y en estos momentos, el subcomisario Freddy Osorio en compañía de sus hombres se encuentran encerrados dentro de la propiedad en conflicto, llamándose al silencio, según los propios policías locales.