Cargando...
La crisis comercial sigue azotando a las ciudades paraguayas fronterizas con el Brasil. A la devaluación enorme del real brasileño frente al dólar, cuyo primer resultado ha sido la casi nula presencia de compradores brasileños en los locales comerciales de las ciudades fronterizas, ahora se suman los estrictos controles de los militares brasileños en las cercanías de las ciudades brasileñas fronterizas con nuestro país.
Los militares brasileños están en pleno desarrollo de la llamada Operación Ágata y toman posiciones en lugares estratégicos cercanos a las ciudades fronterizas con nuestro país e inspeccionan cada vehículo que sale de la frontera.
Durante un recorrido realizado en la víspera por la zona de control, pudimos observar que los militares fuertemente armados con armas de grueso calibre, realizaban un control minucioso de personas y vehículos que salen de las ciudades fronterizas.
Según uno de los uniformados, que se negó a ser identificado, la orden es no dejar pasar ninguna mercadería cuyo valor supera los 300 dólares, el tope permitido para los brasileños que realizan compras en ciudades paraguayas.
La crisis comercial que desde hace meses se está sintiendo en las ciudades fronterizas, se acentúa con este estricto control brasileño y está ya dejando sus secuelas negativas con despidos de funcionarios de algunas casas comerciales.
El empresario Gustavo Cogorno Álvarez, señalo en una conversación telefónica con esta redacción regional, que la situación “esta grave y debemos buscar alternativas para no despedir funcionarios”.
El entrevistado indicó que las ventas cayeron en más del 45% en los últimos meses y que para no despedir a sus funcionarios se está viendo alternativas como disminuir las horas laborales y adelantar vacaciones.
La enorme crisis brasileña, desatada debido a que los grandes hechos de corrupción detectados en la estatal Petrobras y la caída del valor del real ante el dólar generaron una serie de problemas financieros en la clase media-alta de la sociedad brasileñ, disminuyó la llegada de turistas compradores en los comercios de ciudades paraguayas limítrofes con el Brasil.