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La Cámara de Apelaciones, Primera Sala, integrada por los camaristas Pedro Mayor Martínez, Gustavo Ocampos y Gustavo Santander Dans, confirmaron la condena de 9 años de cárcel que le otorgaron a Miguel Ángel Martínez Peralta, quien derramó soda cáustica a su propio hermano, al que dejó ciego.
En octubre del 2018 había sido condenado por el Tribunal de Setencia integrado jueces Víctor Alfieri, Daniel Ferro y Elio Rubén Ovelar, quienes hallaron culpable al hombre del hecho punible de lesión grave. Dicha decisión fue apelada por su defensora, Eliana María Beckellman.
El hecho se registró el 24 de setiembre del 2016 en la vivienda de la víctima, Salvador Esteban Ríos Peralta. Este había declarado durante el juicio que recibió a su hermano de madre en su casa porque no tenía donde vivir.
“Él renunció a su trabajo y tenía problemas económicos, por lo que le designé una habitación en mi domicilio, pero le advertí que tres meses le podía tener conmigo. Justo a los tres meses, me hizo esto”, señaló. Siguió relatando que invitó a su hermano a tomar tereré, fue hasta a la cocina a preparar el tereré y, al salir, se fija en el basurero. “Como yo era una persona muy observadora, veo una cajita de celular, y ya no le vi a mi hermano, y ahí él me llama por mi apodo, Cacho, y me derrama la soda cáustica. El médico le dijo a mi esposa que ya no había nada que hacer, que perdí la visión”.
Por su parte, la defensa de Miguel Martínez había alegado que el hombre tenía trastorno mental grave y por ello había actuado así, cuestión que no se pudo corroborar durante el juicio.