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Los jueces del tribunal Fabián Weisensee, Juan Pablo Mendoza y Laura Ocampos resolvieron por unanimidad declarar culpables a los policías por el disparo que dejó parapléjico a Richard. Ordenaron que ambos guarden reclusión en la Agrupación Especializada de la Policía.
El suboficial Orihuela fue condenado a 20 años de prisión por haber disparado al joven en el irregular procedimiento policial ocurrido en la madrugada del 13 de agosto de 2016 en las calles 24 Proyectada casi Pa'i Pérez de la ciudad de Asunción, a pocas cuadras del domicilio del joven. En tanto, el comisario Zárate recibió 11 años de prisión.
El juez Fabián Weisensee, en la lectura de la sentencia, mencionó que Orihuela y Zárate sabían de lo que estaban haciendo en el momento del hecho, además los calificó como personas instruidas en la Policía, por lo cual se considera reprochable la conducta de ambos.
Señaló que Zárate incurrió en "persecución de inocentes" cuando reportó falsamente a sus superiores que Pereira había disparado contra los policías y que portaba ilegítimamente armas y estupefacientes.
El juez sentenció que "mucho poder trae mucha responsabilidad" y agregó que los policías no pueden emplear sus armas de fuego "de forma arbitraria".