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En la oficina del Viceminsiterio de Trabajo se dio lugar la reunión en el cual las partes elaboraron el acuerdo con el que finaliza 63 días de huelga.
Entre los puntos acordados, se aceptó que siete de los ocho despedidos sean reincorporados. Sin embargo, la discusión giró en torno a quién quedaría fuera de la empresa, informó el periodista Víctor Ruiz.
Los directivos propusieron que sea Claudio Ramírez el único apartado, mientras que los sindicalistas pidieron que éste permanezca y que el desafectado sea Lucas Fernández.
Los choferes Carlos Silva, Darío Vera, Vicente Benítez, Félix Agüero, Simeón Rojas y Oscar Romero ya fueron reincorporados de vuelta, según adelantaron. Por otra parte aseguraron que el acuerdo de levantar la huelga ya está asegurado y es solo cuestión de coincidir en el nombre.
La medida de fuerza tuvo como punto de partida el despido de ocho trabajadores del volante, por lo que unos 60 choferes iniciaron una huelga, 10 de ellos llegaron a crucificarse y otros cuatro llevaron adelante una peligrosa huelga de hambre.
Luego de reiterados intentos de negociación entre representantes, huelguistas y autoridades estatales, la situación llegó a un punto crítico cuando los manifestantes impidieron la salida de las personas reunidas en el edificio del Viceministerio de Trabajo.
Tras esto, los directivos de la empresa se reusaron a volver a reunirse, alegando “falta de garantías”, por lo que la situación se agravó, sin esperanzas de solución a corto plazo.
En vistas a que el problema no iba por buen camino, la Central Nacional de Trabajadores (CNT) y la Federación de Trabajadores del Transporte (Fetrat) amenazaron con una huelga general. Así también pidieron a la Organización Internacional del Trabajo y a la Confederación Sindical de las Américas a que tomen medidas al respecto.