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A Diarte le habían encomendado la tarea de preparar un lugar especial para Chiquitunga, teniendo en cuenta que ya había preparado un retablo donde se encuentra la imagen de la Virgen de los Milagros, que está en el sitio.
El artista tardó 45 días en terminar el minucioso trabajo que tiene relieves en la parte del rostro. La repisa de Chiquitunga tiene una altura de 95 cm por 65 cm de ancho. Está cubierto completamente con semillas. Todas ellas mantienen su color natural, barnizadas para un mejor acabado y protección de las mismas.
El rostro está hecho de sésamo, sus ojos de poroto negro y arroz, sus cejas de chiripiruna y sus labios de semillas de mijo. Todo el contorno de la imagen está cubierto con poroto negro, la parte blanca del hábito está conformada por arroz y la parte marrón por semillas de lino.
Los resplandores son de maíz blanco y soja, el relleno de los espacios de poroto rojo y su aureola de maíz tupi. El contorno del arco está compuesto por semillas de poroto blanco y rellenado con chía, los jazmines que decoran todo el arco están hechos de semillas de melón y sus ramitas de alpiste.