Las autoridades advirtieron de que la mayoría de casos se circunscriben al área metropolitana de Asunción, donde en febrero se detectó el brote autóctono de la enfermedad.
“Sigue habiendo dispersión de casos, pero no estamos viendo un crecimiento exponencial”, declaró en rueda de prensa la directora de Vigilancia de la Salud, la epidemióloga Águeda Cabello.
“Para nosotros eso es importante, teniendo en cuenta que todo hacía suponer que el crecimiento del chikunguña iba a ser exponencial en el país, por las condiciones socio ambientales, climáticas y el 100 % de susceptibilidad de la población”, añadió.
Según Cabello, “hay un factor muy importante que es la presencia de criaderos y la alta movilidad de la gente. La población afectada no hace reposo, no se queda en sus casas y al movilizarse está transfiriendo la infección a otros distritos”.
La ciudad más afectada por el virus, con 83 casos, es la de Fernando de la Mora, que forma parte del cono urbano de la capital de Paraguay.
Le siguen las poblaciones de Villa Elisa, con 80 casos, y Luque, con 35, ambas también cercanas a Asunción, mientras que en la capital se han registrado 30 infectados hasta ahora.
En el país suramericano se produjo además en los primeros días de marzo la primera muerte por complicaciones derivadas del virus del chikunguña, la de un hombre de 56 años, que falleció por un cuadro de hipertensión.
El Gobierno paraguayo ha lanzado la campaña “Juntos contra el Dengue y el Chikungunya” para concienciar a la población sobre la importancia de eliminar los criaderos de mosquitos de las casas, además de para explicar los síntomas de ambas enfermedades, fomentar la consulta temprana y evitar la automedicación.
El chikunguña, una enfermedad originaria de Tanzania y para la que no hay tratamiento, llegó a infectar a cerca de un millón de personas en 2014, según cifras de Organización Mundial de la Salud (OMS).
El Ministerio advirtió también sobre la expansión del virus del dengue, transmitido por el mismo mosquito, que ha dejado en lo que va de año 469 personas infectadas distribuidas por todo el país.
Paraguay ya vivió una epidemia de dengue en 2013, cuando registró cerca de 150.000 personas afectadas por este virus, de las cuales 252 fallecieron por complicaciones derivadas de la enfermedad.
El chikunguña y el dengue no provocan la muerte, pero sí se han registrado decesos debido a condiciones ya existentes en los pacientes, como el cáncer, la obesidad, la diabetes, el asma y la hipertensión.
Entre los síntomas más comunes de ambas enfermedades figuran la fiebre, el dolor intenso de articulaciones o el dolor de cabeza.