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En el 2020, cuando asumieron el comando de la Junta de Saneamiento, la falta de agua era la constante dentro de la comunidad. La deuda de usuarios morosos llegaba al 80%, pues las personas ya casi no pagaban al no recibir ningún servicio.
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A esto se le sumaba una deuda millonaria con la Administración Nacional de Electricidad, atendiendo que hacía años no se pagaba el servicio de la energía eléctrica. Solo en algunos barrios de la población se contaba con la distribución del líquido vital, pero por escasas horas.
A la dura realidad de un pésimo servicio en la distribución de agua, los nuevos integrantes de la comisión comenzaron una dura batalla en pos de dar soluciones a los usuarios. El entonces presidente, profesor Fernando Giménez, y sus demás miembros se remangaron las mangas e iniciaron verdaderos trabajos de voluntariado, con lo que lograron revertir de forma satisfactoria el negro panorama.
Al no contar con ningún superávit inicial en el cobro, lograron que instituciones como la Municipalidad o la misma Gobernación les ayuden para la compra de motores y otros elementos, a fin de hacer posible que toda la comunidad tengan el vital líquido.
Con una exigencia férrea y bien controlada en el cobro a los usuarios, se logró reducir ampliamente la morosidad. Aunque esto, al principio, generó enfrentamientos con personas que se negaban a pagar, alegando influencias políticas, poco o nada les importó a los nuevos miembros dichas preferencias, por lo que simplemente a los usuarios que no pagaban se les cortaba el suministro.
En estos 4 años de mandato, lograron, además, la construcción de un local propio para la institución, con lo que se dejaban atrás los largos años de pago de alquiler. Mientras tanto, el personal accedió a mejorar notablemente sus salarios y, con esto, la seguridad, para que no faltase el agua en la población.
Distribución de agua
La recuperación en el funcionamiento de la Junta de Saneamiento era visible, al punto que, desde el 2022 hasta la fecha, cientos de camiones cisterna proveyeron agua potable a comunidades afectada por la sequía dentro del distrito, como así mismo a los establecimientos ganaderos.
Según datos estadísticos, en todo este tiempo, más de 5 millones de litros de agua potable se distribuyeron a estas comunidades desde esta Junta de Saneamiento, con lo que lograron cumplir el déficit del Estado paraguayo para asistir a los compatriotas, a pesar de ser una institución privada.
Renovación
Con una total aceptación de parte de los usuarios, se realizó la renovación de estas autoridades, quienes, por estatuto, no podían seguir al frente como encargados de la Junta de Saneamiento.
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La asamblea se realizó este sábado y las personas presentes en el lugar no paraban de agradecer el buen trabajo que dejan estas personas, quienes, además de entregar un nuevo local, también dejan 3 motores nuevos para casos de emergencia, insumos varios, el pago al día del personal, incluyendo aguinaldo, y un superávit en caja de casi G. 12 millones.
La comisión saliente estuvo integrada por Fernando Giménez como presidente, Leonardo Lezcano como secretario, Mónica Méndez como tesorera, y como miembros y síndicos, Antonio Wolker, Antonio Segovia y Evaristo Vera.
Los nuevos integrantes de la Junta, electos este sábado, son: Antonio Wolker como presidente, Ovidio Samaniego como vicepresidente, Virgilio Benítez como secretario, Enrique Árias como tesorero, y como miembros y síndico, Wilfrido Feltes y René Gallagher.