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Brigadas de salud de las regiones sanitarias Alto Paraguay y Boquerón se encuentran trabajando en la zona de los desastres cercana a la reserva Chovoreca, prestando asistencia médica a los pobladores del lugar y bomberos voluntarios que trabajan incansablemente para apagar el incendio. Según los datos, el fuego comenzó entre el 2 y el 3 de setiembre y se expandió rápidamente, pero recién el domingo 7 de setiembre llegaron los primeros bomberos.
El personal realiza visitas a las estancias cercanas a la zona del incendio, manifestó el Dr. Ariel Acuña, director de la XVIII Región Sanitaria. Los casos más comunes que afectan a estos pobladores son los relacionados a cuadros respiratorios por la inhalación de humo, aunque también abundan vómitos, náuseas y lesiones externas a consecuencia del fuego.
Ayer asistieron a unas 132 personas, cifra interesante considerando que se debe recorrer varios kilómetros para llegar en cada establecimiento ganadero. En el día de hoy “estamos enviando desde Fuerte Olimpo una carga de medicamentos, oxígeno y mascarillas para reforzar la atención sanitaria en esa zona”, dijo el doctor Ariel Acuña.
Clases presenciales
A pesar de que el martes fueron suspendidas las clases presenciales en todas las escuelas y colegios de los distritos de Fuerte Olimpo y Bahía Negra, en la mañana de este miércoles y tras mejorar la visibilidad, en la capital departamental decidieron retomar las clases presenciales de unos 1.000 alumnos.
En contrapartida continúan con las clases virtuales más de 1.200 estudiantes, pertenecientes a comunidades del distrito de Fuerte Olimpo, asentados hacia el interior del Chaco y toda Bahía Negra.
La mala calidad en la señal de Internet en esta zona chaqueña conspira sobremanera para el normal desarrollo de clases virtuales, tanto para los escolares y maestros, por lo que se espera que mejore la calidad del aire para que se normalicen las actividades educativas.
Incendio forestal
Las mayores bocas de fuego se localizan en la zona conocida como Línea 28, en la misma frontera que nuestro país comparte con Bolivia. Los incendios están próximos a la reserva natural Chovoreca que cuenta con más de 100.000 hectáreas de puro bosque. Los voluntarios, entre bomberos, militares, personal de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) y peones de estancias realizan un titánico trabajo para evitar que las llamas ingresen al parque.
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Lastimosamente, desde las primeras horas de este miércoles soplan con intensidad vientos del sector norte, que sumados a las temperaturas que sobrepasan 40 ºC y la seca vegetación a consecuencia de la falta de lluvias, que hacen que el fuego avance en forma incontenible.
A pesar de las condiciones totalmente adversas, los voluntarios hacen todo lo que pueden para tratar de apagar el incendio, una misión imposible al menos por ahora. Lo único que podría acabar con la verdadera bestia roja es que se produzcan las esperadas lluvias, pero no hay posibilidad de que ocurran, según responsables de la Dirección de Meteorología e Hidrología.
