Energía eléctrica y salud, grandes deudas pendientes del gobierno en la zona del Pilcomayo

MARISCAL ESTIGARRIBIA. El proyecto de electrificación de la ANDE que debía partir desde la zona de Pozo Hondo y atravesar varias comunidades ribereñas como San Agustín e inaugurarse hace un año y medio, están el total ostracismo. Se suma a esto la construcción de un local para Unidad de Salud Familiar (USF) quedó a medio terminar. Los trabajos deberían estar concluidos, pero la población sigue padeciendo la falta total de presencia de estado.

El proyecto de electrificación de varias zona del Pilcomayo lleva más de un año de retraso. Imagen archivo
El proyecto de electrificación de varias zona del Pilcomayo lleva más de un año de retraso. Imagen archivo

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El proyecto de electrificación de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) que debía ejecutarse desde la zona de Pozo Hondo y atravesar comunidades ribereñas como San Agustín y Pedro P. Peña, está parado desde hace más de un año, denunciaron pobladores quienes varias veces por semana sufren los cortes de energía de las precarias conexiones que tienen, las cuales duran días.

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Los pobladores de la zona reclaman que los trabajos ya debían estar listos e inaugurados e incluso los postes de cemento para distribuir la energía eléctrica quedaron a medio enterrar y son visibles las señales de abandono y total desidia estatal. “Quedó todo a medio terminar, no hay ninguna respuesta y en los días calurosos es muy difícil aguantar (...) no sabemos más a quién recurrir”, refirió Martín Carema, un poblador.

Los lugareños durante meses enviaron varias notas en las que solicitan a la ANDE que continúe la construcción para mejorar el suministro de energía eléctrica en la zona, pero no recibieron respuesta concreta, dejándolos en una precaria situación en medio de una ola de intenso calor apenas soportable.

La salud también en desidia

En febrero del 2021 la Itaipú Binacional anunciaba la construcción de 18 Unidades de Salud Familiar (USF) en el Chaco con una inversión de aproximadamente US$ 5.262.382 para reforzar la atención a la salud en zonas vulnerables. Algunas unidades fueron inauguradas, pero en zonas más lejanas del Chaco quedaron obras a medias, como en la comunidad San Agustín, cuyos pobladores dijeron que los trabajos están parados hace casi dos años.

En la binacional hace unos meses explicaron que están en proceso de rescisión de contrato con ALPE S.A., representada legalmente por Alba Marina Penayo Recalde y Esther Recalde Casado. La constructora fue adjudicada para realizar la obra la cual no presenta avances más que el cimiento y el inicio de las paredes y no se tienen datos de si la obra continuará.

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En la comunidad San Agustín, ubicada en el departamento de Boquerón, conviven aproximadamente 250 familias de diversas etnias. Pese a la expectativa generada en un primer momento por la ampliación de las USF en su localidad, la obra actualmente está abandonada, lamentaron los lugareños.

San Agustín se encuentra a 240 kilómetros de la urbe más cercana, que es Mariscal Estigarribia. En el trayecto por lo general hay que sortear talcales, que atasca frecuentemente a muchos vehículos, incluso las propias ambulancias que deben circular por allí en caso de emergencias.

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