El origen de Filadelfia se remonta cuando unas 1.572 personas, que habían emigrado de la Unión Soviética, fundaron la Colonia Fernheim en 1930. Desde entonces lograron organizar 12 aldeas con 20 a 25 granjas cada una. En los siguientes años fueron sumándose otros pequeños grupos. Todos estos constituyen en la actualidad una colonia con 25 aldeas y la zona céntrica, la ciudad de Filadelfia.

Lea más: Inauguran pista de atletismo en Filadelfia

Hoy día, aunque las estadísticas muy inexactamente hablan de 25.000 habitantes, se sabe que los pobladores tanto permanentes como flotantes son más de 30.000, ya que muchos viven en la ciudad por temporadas y hay un flujo constante de personas que llegan buscando mejores oportunidades generando un crecimiento demográfico disperso.

Filadelfia, crisol de razas

Filadelfia emergió de la década de 1920; ha desarrollado una cultura específica con una fuerte influencia germánica y religiosa, y aunque los menonitas son hoy día minoría, igualmente poseen el mayor poder adquisitivo y dirigen las mayores inversiones de la zona. A la vez la población “latino paraguaya” es pujante, cada vez mayor y se suman a la fuerza de trabajo junto con la población nativa las cuales son mano de obra esencial para el crecimiento económico.

Un gran porcentaje de los habitantes del casco urbano son de procedencia indígena, es decir, unos 10.000 habitantes. Este mismo grupo está conformado mayoritariamente por la etnia nivaclé, luego le siguen los Guaraníes y Cacique Mayeto, estos últimos ya asentados en la zona antes de la llegada de los menonitas. Por último, se encuentran los ayoreos que se adaptaron en las últimas décadas a la vida citadina.

Economía local

El rubro principal es el agropecuario, iniciado hace décadas con arados de mano y de forma rústica, sin embargo, hoy día explotan modernas técnicas de producción, fabricación de productos lácteos y procesamiento de sésamo, maní, sorgo, maíz, algodón y varios otros.

Las modernas inversiones se extienden al rubro de las maquinarias, compra de tierras y campos lo que mantiene a la ciudad en un crecimiento sostenido, pero que igualmente depende fuertemente del clima y toca sortear crisis cíclicas de sequía o inundación.

Otro de los puntos que convirtió a Filadelfia en el nuevo horizonte de muchos paraguayos es que se destaca por su seguridad, son pocos los casos de robos u homicidios los cuales en general son resueltos rápido y aún es posible circular relativamente tranquilo por sus calles.

No hay que olvidar las inversiones estatales del pasado gobierno de Mario Abdo Benítez, las cuales inyectaron USD 2.500 millones en obras como el mejoramiento de la Ruta Transchaco, la Ruta Bioceánica, la Ruta de la Leche y otras tantas que valorizaron enormemente la zona.