Guardias armados de una estancia del Chaco habrían torturado salvajemente a dos jóvenes

Guardias privados de la estancia Payco aprehendieron a dos personas, quienes se encontraban en una jornada de cacería, y aparentemente habrían sido torturadas sin motivos aparentes. Agentes policiales rescataron a dos jóvenes, quienes presentaron su denuncia ante la Fiscalía, cuyo titular ya abrió una carpeta investigativa para indagar la denuncia. El establecimiento ganadero se ubica a 40 kilómetros de la comunidad de Puerto Guaraní, perteneciente al distrito de Fuerte Olimpo.

Una de las víctimas de la supuesta tortura de parte de guardias de una estancia muestra la herida recibida en la cabeza
Una de las víctimas de la supuesta tortura de parte de guardias de una estancia muestra la herida recibida en la cabezaabc color

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La denuncia presentada ante el Ministerio Público hace referencia a los hechos sucedidos en la tarde del miércoles e involucra de forma directa al administrador y los guardias privados de la estancia Payco, ubicada a unos 40 kilómetros de la localidad de Puerto Guaraní. Los mismos fueron acusados de aprender de forma ilegal y realizar supuesta tortura física contra los jóvenes Adán Ayala Garcete y Cristian Insaurralde Escobar, ambos pobladores de dicha comunidad.

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Según esta denuncia, ambas personas, a bordo de una moto, se dirigían a la estancia Mbokaja con el objetivo de llevar a ese lugar a Cristian, atendiendo que el mismo trabaja en dicho establecimiento ganadero. Aprovechando el viaje, decidieron llevar un rifle para realizar cacería, atendiendo la gran cantidad de animales silvestres existentes por la zona.

En un momento dado y estando dentro de la propiedad de la estancia Rieder, lindante con el establecimiento ganadero Payco, los jóvenes divisan un cerdo salvaje, por lo que decidieron dejar su motocicleta en el camino e internarse en el monte a fin de perseguir al animal en cuestión, todo esto sucedía alrededor de las 16:00 del miércoles.

El intento por cazar al animal silvestre fue en vano, por lo que estas personas regresaron al lugar donde dejaron la motocicleta con el objetivo de continuar viaje, pero grande fue la sorpresa de los mismos, ya que no encontraron su móvil, ante esta situación decidieron caminar hasta el casco central del retiro 19, propiedad de la estancia Rieder.

Sigue diciendo la denuncia, que en un momento dando, divisaron un vehículo que al final resultó ser propiedad de la estancia Payco, cuando intentaron parar el móvil para preguntar por su motocicleta, según los jóvenes, fueron recibidos a balazos, por las personas que se encontraban en el interior de la camioneta.

Una vez que estos hombres descendieron del vehículo pudieron percatarse que se trataban de guardias armados al servicio de la estancia en cuestión, acompañados del administrador del mencionado establecimiento, los mismos, sin mediar palabras procedieron a golpear a estas personas, para luego maniatarlos de manos y tirarlos en la carrocería del vehículo.

“En todo momento fuimos brutalmente golpeados, nos propinaron fuertes golpizas con culetazos de escopeta, además con los puños y patadas. Posteriormente nos llevaron al casco central de la estancia Payco, donde prosiguieron los golpes, además de despojarnos de nuestro teléfonos celulares, y exigir que les demos nuestros códigos de seguridad. A cada instante nos preguntaban si conocíamos a las personas que les robaron sus animales vacunos”, relata la denuncia.

Adan Ayala Garcete fue el que más golpes sufrió durante la tortura de parte de los guardias.
Adan Ayala Garcete fue el que más golpes sufrió durante la tortura de parte de los guardias.

Cuando se dieron cuenta que en verdad desconocíamos los que ellos querían, se comunicaron con los agentes policiales antiabigeato. “Los mismos llegaron en horas de la madrugada del jueves y procedieron a tomarnos los datos y luego llevarnos hasta la fiscalía de Fuerte Olimpo, para finalmente obtener nuestra libertad”, expresa la denuncia.

De forma inmediata ambas víctimas se constituyeron hasta el Hospital regional para recibir los primeros auxilios, tras constatarse las graves lesiones que sufrieron. En tanto la motocicleta y el arma de fuego, quedaron retenidos en el Ministerio Público, hasta tanto estas personas presenten las documentaciones que acrediten su legalidad.

Las victimas piden de manera urgente al juzgado de primera instancia allanar la estancia Payco, a fin de poder examinar las grabaciones del circuito cerrado del lugar, en caso de que se tenga este material, y que también se solicite al Hospital Regional el certificado médico.

Escueto parte policial

El parte policial del Departamento de Lucha Contra el Abigeato relata que fueron alertados por personal de la estancia Payco, sobre la presencia de personas extrañas en el interior del establecimiento.

Cuando llegaron al sitio, encontraron a los ciudadanos Adán Ayala Garcete (35), licenciado en administración agropecuaria y Cristian Insaurralde Escobar (29), y en su poder se encontró una motocicleta y el arma de fuego en cuestión, luego trasladaron a ambas personas hasta el hospital regional, para un diagnostico médico y finalmente presentarlos ante el Ministerio Público.

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Investigación fiscal

Tras lo acontecido, el fiscal de la causa Andrés Cantaluppi, ordenó la apertura de una investigación a fin de determinar lo sucedido, al tiempo de fustigar el supuesto hecho de tortura que habrían realizado estos guardias privados. En caso de que esto sea cierto, los mismos serán procesados al igual que los responsables del establecimiento ganadero, ya que nadie puede realizar este tipo de acciones, de constituirse en jueces, para eso están los representantes de la ley, dijo el abogado.

Si bien esta estancia ya sufrió en varias ocasiones hechos de abigeato, eso no les concede el derecho de realizar intervenciones, contra ciudadanos indefensos, el fiscal ya dispuso la orden a los efectivos policiales, para que puedan presentar ante el ministerio pùblico, a las personas citadas en la denuncia de estos jovenes.

Intentamos obtener la contraparte, en este caso, la versión de los responsables de la citada estancia, para lo cual nos comunicamos con el administrador Edgar González, y en un momento dado, se corta la comunicación. Procuramos volver a comunicarnos con el mismo, pero ya no respondía la llamada. Los tres últimos números del celular de este personal es 553.

El joven presenta todo tipo de golpes en el cuerpo.
El joven presenta todo tipo de golpes en el cuerpo.
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