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El astillero Desvars SRL, propietario de la Lancha Aquidabán, remitió a la Prefectura Naval de Concepción un pedido de suspensión temporal de los viajes semanales que la citada embarcación, realiza hacia la zona norte del país. Explica que el motivo es la extraordinaria bajante del río Paraguay que impide navegar de manera normal.
De esta manera y desde esta semana están suspendidos los viajes de la emblemática embarcación que surca el río Paraguay desde hace más de 35 años, con servicio de transporte de pasajeros y de mercaderías asegurando el abastecimiento a numerosas poblaciones del Alto Paraguay, principalmente a las que están en situación de aislamiento a consecuencia de los precariedad de los caminos de tierra del departamento.
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Esta decisión perjudica sobremanera a los pobladores de la zona, especialmente a los habitantes del distrito de Bahía Negra, ya que el camino que conduce a la zona se encuentra en condiciones desastrosas actualmente. Solo en vehículos todo terreno 4X4 se puede llegar al lugar.
Pedro Coelho, encargado de la agencia Aquidabán en Concepción, dijo que más de 14 tripulantes de la embarcación temporalmente también quedan sin trabajo. La suspensión ocasiona cuantiosas pérdidas económicas a los dueños de la lancha y perjudica a las familias de los trabajadores que quedan sin ingresos mientras no se se reanuden los viajes.
Mercado ambulante
La lancha Aquidabán es conocida como un mercado ambulante, atendiendo a que en su interior trabajan de manera independiente varias personas que venden desde frutas, verduras, comestibles hasta vestimentas a los pasajeros y las personas de las diferentes poblaciones que suben al barco en cada puerto que atraca.
Estos trabajadores también son afectados de manera directa por la suspensión de los viajes, lo que repercutirá de manera negativa en la economía familiar de cada una de ellas.
La lancha sale los días martes del puerto de Concepción con gran cantidad de carga y pasajeros. A medida que avanza el viaje agua arriba se puede disfrutar de la belleza natural, sobre todo cuando se ingresa en la zona del Gran Pantanal, donde por lo general se observan animales silvestres, como yacaré, carpinchos y nutrias a orillas del río.
La embarcación permanece por varios minutos en cada puerto donde atraca para el descenso y ascenso de pasajeros, así como para descargar las mercaderías. También es cuando las personas de esas comunicades aprovechan para subir al barco para realizar compras.
Los puertos donde atraca están ubicadas en Puerto Pinasco (Pdte. Hayes), Puerto Casado, Vallemí (San Lázaro, Concepción) Puerto Sastre, Carmelo Peralta, Puerto Guaraní, Fuerte Olimpo, Puerto Leda, Puerto Esperanza y Bahía Negra, donde llega los viernes en horas de la mañana. El viaje de regreso es el mismo día y llega a Concepción domingo en horas de la tarde.
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El servicio que presta esta embarcación a los pobladores de la zona norte, sobre todo de las comunidades del Alto Paraguay, es de vital importancia, atendiendo a que en la zona son pocas las ofertas de medios de transporte.
Bajante
La bajante del río Paraguay ocurre desde el año 2020. Los puntos críticos para la navegación se localizan entre las zonas de Concepción y Vallemí, situación que que en los últimos dos años obligó a los dueños de la embarcación Aquidabán a realizar viajes solo desde Vallemí hasta Bahía Negra, ya que más hacia el norte la avegabilidad es más segura.
Sin embargo, en esta ocasión esto no será posible, atendiendo que la embarcación se encuentra en el puerto de Concepción, y no podrá llegar hasta Vallemí, precisamente por los tramos difíciles que se presentan en el trayecto por el estiaje extremo del río Paraguay.
Se debe esperar que el río experimente aumento de su caudal de al menos 40 cm para que la lancha pueda salir del puerto de Concepción, mencionaron los navegantes. Aunque existen noticias de que más hacia el norte, en la naciente del río, ya se da un paulatino incremento del nivel del agua, tardaría aproximadamente 30 días para que el fenómeno ocurra en los tramos críticos.
