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El lugar donde se localiza el inconveniente se encuentra a unos 120 kilómetros del casco urbano de Fuerte Olimpo, en la zona conocida como Pensilvania. En dicha zona se produjeron lluvias que superaron los 120 mm, en el transcurso de la semana pasada.
Esta situación hizo que las aguas inunden alrededor de 1.000 metros de camino de tierra, que conduce a las poblaciones de María Auxiliadora y a todas las comunidades del distrito de Bahía Negra.
Sucede que en ese sector, como en casi todos los tramos ruteros, no se realizan los trabajos de levantes o cargadas de tierras, y cada vez que se repara, solo hacen simples raspajes, lo que debilita aún más la estructura del camino, por lo que fácilmente son inundables cuando llegan las lluvias.
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Esta situación es algo atípico ya que a pesar del periodo de sequía que aún se vive en la zona, con otras lluvias que se produzcan, fácilmente estas comunidades citadas podrían quedar aisladas, lo que será un tremendo problema tanto para los pobladores como para los productores de la región que no podrán sacar sus ganados hacia los frigoríficos.
Atendiendo que varios camiones quedaron varados en el lugar, maquinarias de la Gobernación y el MOPC, procedieron a realizar trabajos de despeje de las aguas a fin de permitir el tránsito de los vehículos, esto con el acompañamiento de la asociación de caminos de la zona.
Estos trabajos son conocidos como “encajonados”, que consiste en formar pequeños muros a ambos costados del camino, a fin de evitar el ingreso de las aguas desde las cunetas.
Conociendo experiencias anteriores de este tipo de trabajo, apenas se produzcan otras lluvias, el lugar se convertirá en un verdadero riacho, lo que significará el aislamiento de las poblaciones del distrito de Bahía Negra y la comunidad de María Auxiliadora, perteneciente al distrito de Fuerte Olimpo.
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La crítica y rabia de los pobladores no se hicieron esperar, atendiendo lo importante que es contar con los caminos, y sobre todo porque ya no desean que se repitan los eternos aislamientos de otras épocas. Las personas piden a los responsables la reparación de estos caminos, y que se realicen trabajos de levantes o cargas de tierras, y sobre todo la colocación de tubos para permitir la circulación de las aguas.
Las personas mencionan que en años anteriores, cuando tuvieron que soportar aislamientos de varios meses, se debía a la gran cantidad de agua que existía por la zona, producto de las grandes y continuas lluvias, por lo que en algo se comprendía la situación por entonces, sin embargo, ahora es totalmente diferente, ya que se vive aún un periodo de larga sequía y no puede ser que con las primeras lluvias ya se tengan estos problemas, alegan.
Exigen a los responsables de la asociación de caminos que utilicen el dinero que recaudan en el puesto de peaje, para realizar estos trabajos, aún se tiene tiempo para evitar que estas poblaciones queden aisladas.
