Sequía resiente la producción de pobladores del Pilcomayo

FILADELFIA. La extrema sequía de la cuenca del río Pilcomayo, sumada al lento escurrimiento de las aguas hasta la zona de General Díaz, provocan que el cauce hídrico impacte en la producción de los pequeños ganaderos de la zona, quienes por la falta de lluvia se ven obligados a suplementar o a deshacerse de su ganado. La espera por las lluvias se torna imperante.

Uno de los brazos del Río Pilcomayo, cuyos pobladores enfrentan los severos efectos de la sequía.
Uno de los brazos del Río Pilcomayo, cuyos pobladores enfrentan los severos efectos de la sequía.

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La actual falta de lluvias afecta la dinámica productiva de la región chaqueña, especialmente en los sectores en donde la producción es cuestión de subsistencia y en donde el tenor productivo tiene como fin el autoabastecimiento. Tal es el caso de pobladores de la zona del río Pilcomayo quienes manifestaron sortear la sequía “como se puede”, subrayando el impacto que les genera.

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“Realmente la sequía se esta sintiendo mucho en nuestra comunidad, hay personas que no están teniendo más agua en sus aljibes. Pedimos que las autoridades también se puedan encargar de nosotros (...) falta también agua para los animales, no hay pasto y el ganado necesita ser movido para no morir de sed. Hay muchas perdidas, nos afecta muchísimo”, dijo una pobladora de la zona de Virgen de Fátima.

Pese a que hubo algunas lluvias durante este año, lo cierto es que no fueron del volumen esperado, por lo que está latente repetir los escenarios del año pasado, cuando muchos productores se vieron obligados a vender su producción a un precio irrisorio para no tener demasiadas pérdidas.

El caudal del río Pilcomayo es mucho menor de lo normal debido a la sequía en la cuenca ubicada en Bolivia, a esto se suma la severa falta de lluvias en el Chaco.
El caudal del río Pilcomayo es mucho menor de lo normal debido a la sequía en la cuenca ubicada en Bolivia, a esto se suma la severa falta de lluvias en el Chaco.

Otros ganaderos mencionaron estar administrando como pueden el forraje y agua, pero que igualmente es una situación difícil. El panorama con las semanas puede igualmente tornarse crítico, sumado a esto que las próximas lluvias son impredecibles.

El Chaco se caracteriza por tener pocos niveles de lluvia y los productores del sector ganadero de alguna forma se prepararon para un año seco, con reservorios, pero igualmente es una situación atípica, porque la sequía ya azota por tercer año consecutivo.

Otro factor preocupante es que el propio río Pilcomayo, que suele ser caudaloso enfrenta una sequía por falta de lluvias en la naciente, que está en Bolivia, por lo que la embocadura en el canal paraguayo no funciona para la captación de agua, para lo cual la Comisión Nacional del Pilcomayo está trabajando a modo de mantenerlo abierto.

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