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A pesar de las numerosas limitaciones alegadas por los auditores para la realización del trabajo, los funcionarios de la Contraloría General de la República, detectaron irregularidades en el uso del dinero público por un monto cercano a los G. 2.000 millones, en los periodos investigados.
El intendente Joao Ferreira (ANR) va por su segundo mandato al frente de este municipio. El presupuesto anual de la Municipalidad es superior a los G. 4.000 millones, y desde el 2015 hasta setiembre del 2022, la administración del jefe comunal recibió transferencia de parte del Ministerio de Hacienda, más de G. 16.000 millones en concepto de Royalties, Fonacide, Juegos de Azar y Compensaciones.
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Irregularidades
En relación al periodo fiscal 2018, el equipo de auditores, detectó deficiencias documentarias en el pago con rubro de royalties por un monto de más de G. 160 millones, también se evidenció la falta de documentaciones respaldatorios por valor de G. 11 millones.
Se verificó diferencias en el pago de combustible por valor de casi G. 30 millones, pero la mayor irregularidad detectada en este periodo, guarda relación a la falta de documentos que respalden las órdenes de pago por un monto cercano a los G.1.500 millones.
Los trabajos también pudieron evidenciar que se realizaron pagos en diferentes conceptos, a un solo beneficiario, en este caso a Óscar Ramírez, por un monto de más de G. 300 millones, situaciones que no se ajustan a las restricciones de la ley.
En lo que se refiere a la auditoría correspondiente al periodo 2019, el equipo de contralores detectó que se realizaron erogaciones en concepto de honorarios profesionales, sin tener documentos respaldatorios por un monto de G. 159 millones.
En relación al uso de combustibles en este periodo, nuevamente se detectó diferencias por valor de más de G. 31 millones; también se pudo comprobar la falta de documentaciones respaldatorios correspondientes a gastos por un monto de casi G. 35 millones.
Limitaciones de trabajo
El equipo de auditores de la CGR resaltó que la Municipalidad de Bahía Negra tuvo dificultades, para la provisión de documentos en forma continua, debido a la ubicación geográfica del municipio.
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Las limitaciones para el transporte tanto aéreo como terrestre de las documentaciones hacia la capital del país, así como la temporada de lluvias y la cuarentena de las personas por la pandemia del covid, imposibilitaron al grupo de contralores que pueda llegar hasta la sede de esta Municipalidad chaqueña, razón por la cual los trabajos solo se limitaron en la capital del país, con las documentaciones a la cual accedieron.
El equipo de trabajo de la CGR estuvo a cargo de los auditores Abel Benítez y Christian Meza, como jefe del equipo estuvo Luis Rodríguez, en calidad de Supervisor Hugo Benítez, todos bajo la coordinación de Nelson Salinas.