Cargando...
En la comunidad indígerna Aché Kuetuvy se produce desde los últimos meses al menos tres situaciones enmarcadas dentro de la tipología penal, desde la invasión de inmuebles, la deforestación hasta la presencia de cultivos ilegales, específicamente de marihuana, según manifestaciones de los propios nativos, indicó a ABC Color, Oscar Rodas, responsable de Cambio Climático dela WWF.
La mayor preocupación de la organización tiene que ver con el desmonte, con más de 100 focos nuevos de cultivos presuntamente ilegales en un promedio de dos hectáreas cada uno, que coinciden con la presencia de personas extrañas que entran y salen de la finca ubicada en el distrito de Yby Pytá.
“Al activar nuestro sistema de monitoreo, hemos detectado más de 100 deforestaciones que por ubicación y diseño corresponderían con cultivos ilícitos, nunca hemos observado que en cuatro meses más de 100 focos se hayan instalado en un territorio determinado, estamos hablando de 200 hectáreas”, expresó.
Según Rodas estos cultivos están a escasos dos kilómetros del lugar donde está asentada la comunidad, compuesta por hombres, mujeres, niños y ancianos, “para nosotros ya deja de ser una denuncia más de las muchas que hacemos, sino que pasa a tener ribetes de crisis humanitaria y los poderes del Estado deben resguardar el interés de estas personas”.
Para el ambientalista la situación pone en serios riesgos el medio de vida de los nativos Aché, quienes se caracterizan por convivir en armonía con el bosque, “el bosque atlántico del Alto Paraná es un elemento de biodiversidad que sustenta a estas comunidades que viven y se desarrollan en este bosque y el gobierno paraguayo se comprometió a mantener la finca con una cobertura boscosa”, explicó.
Rodas señaló que ya se hizo una denuncia ante el Ministerio Público y espera que intervengan otros organismos del Estado, comola Comisiónde Asuntos Indígenas del Senado, para el resguardo inmediato de esta población. “Ellos manifestan estar en una zozobra permanente, su propiedad está siendo degradada en materia ambiental, la efectividad o no de nuestra denuncia la vamos a medir cuando la reacción de las fuerzas vivas, resguarden la seguridad de las personas y los recursos naturales de la comunidad”.
La comunidad indígenas Aché Kuetuvy tiene título definitivo sobre la propiedad en cuestión, unas4.768 hectáreasde la colonia que lleva su mismo nombre, ubicada en el distrito Yvy Pytã, identificada como finca 470. Aún así, un grupo de compatriotas se instaló en el sitio alegando que son “tierras fiscales” y el desalojo se viene postergando desde el pasado 16 de marzo.