De esa manera, Cartes resumió su decisión de negociar y discutir con todos los socios de Paraguay de “igual a igual”, de manera que “las cosas sean útiles” para todos.
En una comparecencia conjunta ante los periodistas, Cartes dijo junto a Rousseff que su país “tiene hoy un crédito del que antes no gozaba” y que está determinado a que, durante su Gobierno, que comenzó el 15 de agosto, se “hable poco”, pero “se trabaje mucho más”.
El presidente paraguayo declaró que comparte con Rousseff su “gran preocupación” por el combate a la miseria y aseguró que ambos han hecho de “esa lucha una bandera”. Cartes también anunció que continuará con las iniciativas en favor de regularizar la situación de los brasileños que viven en Paraguay en condición de ilegales y de las propiedades que han adquirido en suelo paraguayo.
“No quiero que Brasil nos haga otra vez esos viejos reclamos por títulos de propiedad (de tierras) o de legalizaciones”, declaró el presidente paraguayo.
En su breve discurso, Cartes no hizo alusión alguna al Mercosur, que está a la espera de que se concrete la reincorporación plena de Paraguay.
Junto con Argentina, Brasil y Uruguay, Paraguay es uno de los cuatro socios fundadores del bloque, que incorporó a Venezuela el 29 de julio de 2012, el mismo día que decidió por primera vez aplicar la llamada “cláusula democrática” y suspender a uno de sus miembros.
Paraguay fue sancionado después de la destitución del entonces presidente Fernando Lugo, la cual el Mercosur interpretó como una “ruptura del orden democrático”, que consideró luego subsanada con las elecciones del pasado abril de las que Cartes fue el ganador.
No obstante, aunque las sanciones fueron levantadas después de su investidura, Cartes aún no ha dado pasos formales para el regreso de Paraguay al bloque.
Tras la comparecencia ante los periodistas, ambos mandatarios se trasladaron a la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores, donde Rousseff ofrecerá un almuerzo en honor a la delegación paraguaya.
Posteriormente Cartes hará una visita al Congreso, donde será recibido por las autoridades de la Cámara de Diputados y del Senado, y luego se trasladará al vecino Tribunal Supremo, para una reunión con el presidente de ese organismo, Joaquim Barbosa.
Antes de regresar a Asunción, el presidente paraguayo también se entrevistará con directivos de la Confederación Nacional de la Industria (CNI), en lo que supondrá el último compromiso oficial de su primera visita a Brasil.