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Los tres jefes en ese entonces –hoy ya no ocupan sus cargos– fueron citados a declarar por la fiscala Ledesma este sábado, informó Perla Silguero, periodista de ABC Color. Estos procesados son Cristino Ramón Aranda, exdirector de Policía de San Pedro; Aldo Miguel Rodríguez Ruiz, exjefe del Grupo Especial de Operaciones (GEO) de San Pedro; y Darío Figueredo Montiel, exjefe de la comisaría 18ª de Santa Rosa del Aguaray.
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Rodríguez y Montiel se abstuvieron de declarar y Aranda pidió la suspensión del procedimiento. Su abogado alegó que no tenían una copia de la imputación. De igual forma, Ledesma adelantó que pedirá prisión preventiva para estas personas y será un juez o jueza quien ordene dónde.
Tanto Aranda, Rodríguez como Montiel fueron imputados ayer viernes por los posibles crímenes de extorsión agravada y asociación criminal y por omitir crímenes establecidos en la Ley 1340/88.
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Los tres jefes policiales fueron involucrados en las investigaciones realizadas por el Ministerio Público y la Secretaría Nacional Antidrogas en el marco del operativo “Espada”, efectuado el pasado 17 de mayo en una estancia de la colonia Hugua Guazú del distrito de General Aquino (departamento de San Pedro), cuyo propietario es Ramón Giménez Velázquez. En el sitio hallaron una avioneta boliviana con más de 300 kilos de cocaína.
La fiscala concluyó detallando que sí existía una orden de operación que está fechada el 8 de mayo pasado, pero que las coordenadas no corresponden al sitio en donde se les encontró tanto a los policías como a los integrantes de la banda de delincuentes el día 17.
Durante el operativo “Espada”, impulsado por la Senad el 17 de mayo, fueron detenidas 12 personas, que también ya se encuentran imputadas: Amado Pérez (presunto líder de la banda de narcotraficantes), Ramón Giménez , Luis Candia Zelada, Celso Benítez y Carlos Escobar, quienes poco antes habrían sido interceptados por los agentes policiales Édgar Diosnel Sosa, Juan José Benítez José David Alonso, Pablo Cabrera, Víctor Dávalos y Antonio Joel Quiñónez.
Aranda, en calidad de director de la Policía en San Pedro, sería quien organizó al grupo para respaldar a los narcotraficantes y quien lideraba las operaciones ilícitas, mientras que Figueredo Montiel sería quien dio el lugar de la planificación del delito y otorgó la cobertura policial de apoyo a la banda delictiva.
Finalmente, se sospecha que el oficial 1° Rodríguez Ruiz fue el encargado del soporte legal y de las tareas de vigilancia preventivas, dando datos incorrectos al fiscal de la zona, entregando armas y asignando personal policial a los delincuentes. También sería el responsable de haber entregado armas de la Policía Nacional que fueron encontradas en el lugar donde se realizó el operativo “Espada”.