Cargando...
Entre los devotos promeseros de la Virgen de Caacupé que descansan en la plazoleta se encuentran Yohana Lorena Duarte Galeano (29), Blas Rojas (33) y el pequeño hijo de ambos, Alex Agustín (6). Junto a una veintena de personas llegaron desde San José de los Arroyos luego de caminar 51 kilómetros tras un peregrinaje que completaron en 25 horas.
Salieron de San José de los Arroyos el 5 de diciembre a las 17:00 y llegaron ayer a las 18:00 a la Basílica menor. Para que Alex Agustín no se cansara lo llevaron en un carrito de bebé.
Encima de un pirí y frazadas se instalaron bajo un frondoso árbol de ficus para relajarse. No podían ocultar que tenían sus cuerpos adoloridos.
Blas peregrina cada año desde hace cuatro lustros y en los primeros tiempos lo hacía desde Coronel Oviedo, mientras que Yohana Lorena se sumó este año. La joven comentó que el año pasado, cuando se encontraba en Caacupé el 7 de diciembre le avisaron que su sobrino y ahijado Nery Diosnel (2) debía operarse de urgencia de peritonitis, entonces le pidió a la madre común de los católicos paraguayos que lo protegiera para que la cirugía fuera exitosa. Así ocurrió y este año en agradecimiento acompañó a su esposo nuevamente.
Esperarán hasta la llegada de la Virgen peregrina de Coronel Oviedo, que partió de la capital de Caaguazú la tarde del 5 de diciembre. Tradicionalmente, el contingente de la zona Este llega al mediodía del 7 de diciembre.
Por otro lado, Alicia Feltes y su sobrina María Lorena Bolaños caminaron 86 kilómetros desde Coronel Oviedo. También, junto a otros cuatro familiares esperaban la llegada de la Virgen peregrina.
Alicia, que por quinto año consecutivo cumple su promesa, comentó que salieron del barrio Santa Lucía de Coronel Oviedo a las 15:00 del 5 de diciembre y llegaron en horas de la mañana.
Cada una tiene una promesa, pero prefirieron mantenerla en reserva.