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En la mañana de este lunes Camila Cabriza (23) recibió el alta médica del sanatorio San Roque, donde estaba internada y fue operada para tapar el orificio que hizo la bala. Camila vivirá con esa bala por el resto de su vida, pero los médicos estiman que dentro de dos años su vida se normalizará.
Ahora inicia un largo proceso de recuperación. Camila podrá caminar durante 15 minutos dos veces por semana, y deberá asistir a sicoterapia y fisioterapia.
Camila fue víctima de un asalto por parte de motochorros el pasado 12 de abril cuando llegaba a su casa en el barrio Las Palmeras de Luque.
El momento en que fue atracada quedó grabado en el circuito cerrado que su propia madre, Ruth Ozorio había hecho instalar frente a su casa por motivos de seguridad, y eso permitió que los delincuentes sean capturados.
Al salir del sanatorio Camila conversó con los medios de prensa y dijo que perdona al joven que le disparó y que no le guarda rencor.
Contó que en todo momento estuvo conciente y que lo que más quiere retomar su vida normal. Por ahora debe preguntarle a su sicóloga todo lo que hará y cómo lo hará.
"Quiero entrenar, quiero correr, quiero estudiar", dijo la joven. Indicó que los dolores por la operación lo maneja con análgesicos y además debe tomar un anticonvulsionante todos los días.